El puente Guozigou no es el más alto del mundo, pero sí que, según los expertos, ganaría el título al puente atirantado de gran tamaño más remoto del mundo. Aunque este epíteto parezca algo rebuscado, esta estructura inaugurada en 2011 está considerada una de las obras de ingeniería más impresionantes de China.
El puente Guozigou, también conocido como puente Talki, tiene una altura máxima de 209,5 metros y se eleva sobre un valle con una altura libre de 180 metros, sustentado por pilares en forma de H, lo que sí lo convierte en uno de los puentes más altos de su tipo en China. Su construcción supuso un desafío técnico considerable debido a las condiciones geológicas y climáticas extremas de la región.
El puente Guozigou forma parte de la autopista G30 Lianyungang–Khorgas, una de las principales rutas este-oeste de China. Está formado por cuatro carriles, dos para cada sentido, y su uso es totalmente gratuito. Más allá de la dificultad técnica y la ejecución, el puente Guozigou ha sido elogiado por su diseño estético, que lo ha convertido en un símbolo del progreso tecnológico de China.
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