“Cuando te encuentras el coche más madridista del mundo”. Así comienza el vídeo grabado por un usuario de TikTok (fvkmiguel) que publica constantemente contenido relacionado al fútbol.
¿Qué modelo es? Se trata de un veterano Mercedes Clase E (fabricado en 1995) que se encuentra en La Pola de Gordón (León) y pertenece a un fanático del Real Madrid. El coche tiene decenas de pegatinas adheridas a la carrocería y hasta en las llantas y en el techo. Sin duda, el coche perfecto para Tomás Roncero, el periodista responsable de la información de este club en el Diario AS.
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El coche más madridista
“Hala Madrid”, “Orgullo madridista”, son algunas de las frases que se pueden leer estampadas en el vehículo. Y no sólo en el exterior de este: también ha sido decorado en su interior.

Pero, ¿es esto legal?
En resumen, el caso del coche madridista no incumple la norma. Eso sí, llevar pegatinas en el coche, aunque sorprenda a muchos conductores, puede llegar a ser motivo de multa según el Reglamento General de Circulación. Los motivos por los que una pegatina se puede convertir en una multa son dos.
Aunque lo más habitual es pegarlas en zonas como la parte trasera del coche, equivocarse o querer salir de la norma puede costar algunos cientos de euros a su conductor. Cualquier pegatina que obstaculice la visibilidad del conductor o que cubra la matrícula está prohibido y será motivo de multa.
En este capítulo se incluyen también las láminas que se utilizan para tintar los cristales. Esta técnica debe realizarse siguiendo unas instrucciones concretas para poder ser homologada y, por lo tanto, no sancionable.
Cuidado con las pegatinas en la matrícula
La Dirección General de Tráfico también prohíbe utilizar pegatinas de tipo reflectante, ya que pueden afectar a la visibilidad de otros conductores cuando rebota en ellas la luz de otros faros, provocando deslumbramientos.
Además, el resto de pegatinas que se coloquen en la carrocería del coche deben dejar la zona de la matrícula siempre libre. Cualquier tipo de adhesivo o pegatina que se coloque encima de la placa conllevará una multa de hasta 6.000 euros. Por ejemplo, el truco de utilizar hojas falsas pegadas a la matrícula para eludir la vigilancia de los radares entraría dentro de esta categoría.
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