Donde fueres… haz lo que vieres. Es una máxima que normalmente aplicamos, ya seamos personas o animales, y este bulldog no iba a ser menos. Tras cierto entrenamiento, el perro (que tiene más estilo que nadie sentado en el depósito de la moto) ha aprendido a saludar a los motoristas cuando se los cruza por la carretera. Cierto que no puede hacer la clásica ‘V’, pero se le perdona.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram