Un Mercedes futurista hecho con bacterias, champiñones y bambú

Por ahora, el EQXX es un prototipo casi secreto de Mercedes que explora las tecnologías del futuro previstas por la marca de la estrella. Es eléctrico, pertenece a la estirpe de los vehículos-laboratorio y todo en él, desde su concepción digital a sus increíbles prestaciones, nada tiene que ver con los modelos actuales.  

Aunque todavía no se sepan todos los detalles de sus características mecánicas, la marca de la estrella ya ha desvelado algún dato fuera de serie, como que su batería dispone de una autonomía superior a los 1.000 kilómetros. 

Pero, aunque la muy aerodinámica carrocería (Cx 0,17) y la tecnología de su mecánica impresionen, el interior de aspecto futurista no desmerece. Y es que todos los materiales utilizados en su fabricación son naturales, de origen vegetal y totalmente reciclables. 

La electrificación está dando paso a coches que no emiten gases contaminantes y además que sean también ecorresponsables en su producción. EL EQXX sigue este planteamiento hasta en sus más mínimos detalles, y su interior es una auténtica demostración de los nuevos materiales que llegarán en un próximo futuro. 

Cuero de champiñones

Vegetales, obtenidos de fuentes renovables y aprovechando en gran parte productos reciclados. Así son los componentes del EQXX. Por ejemplo, las alfombrillas están hechas con un material a base de fibras de bambú. Además, la tapicería de los asientos y su relleno es de un componente hecho con hojas del cactus nopal, previamente secadas, trituradas y combinadas con fibra de poliuretano reciclado para conseguir un acabado más duradero y elástico. 

Por su parte, las fundas (con aspecto de cuero auténtico) provienen de otro ingrediente natural. Se obtiene de champiñones y, después de un proceso químico no contaminante, puede ser curtido y tintado de modo parecido al de las pieles animales. 

Telas elaboradas por bacterias

En las inserciones de aspecto textil, Mercedes ha utilizado otra innovadora tecnología: obtiene una seda ultrarresistente elaborada en un cultivo de bacterias alimentadas con almidón.  

Para terminar, los asientos y los paneles de las puertas están tapizados por un revestimiento con polietileno de origen 100% reciclado a partir de los plásticos más comunes que se desechan a diario. 

Todavía no hay ninguna certeza sobre si el eléctrico EQXX verá algún día la luz como un modelo más de la gama comercial Mercedes. Sin embargo, algunos de los procesos empleados en su fabricación, todavía en fase experimental, se aplicarán para reducir al mínimo el impacto medioambiental.