Apasionado y clarividente. Charles Fawcett es un empresario británico que dirige un establecimiento de modificación de coches llamado Twisted Automotive, ubicado en Yorkshire (Inglaterra). Está especializado en preparar coches de la marca Land Rover y ahora puede que esté realizando el mejor negocio de su vida.
En 2017, Land Rover dejó de producir el Defender clásico para dejar paso a una nueva generación que llegó en 2020, ya con una versión electrificada mediante una mecánica híbrida enchufable. Anticipándose al relevo y atisbando un beneficio seguro, en 2015 Fawcett encargó nada menos que 200 unidades del mítico todoterreno.
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Y con el tiempo, la idea se ha revelado como una apuesta segura. Muchos coleccionistas, seguidores de la marca y amantes del 4×4 ansiaban, antes de que desapareciera, hacerse con un Defender de los tradicionales, con transmisión mecánica a la vieja usanza y sin concesiones a la moderna electrónica.
Serie especial
Como preveía el avispado empresario, el negocio ha resultado redondo y ha rentabilizado con creces la inversión realizada en el año 2015. Porque el beneficio ha sido más que notable, al adquirir estos Defender 110 por unos 40.000 euros cada uno y revenderlos posteriormente por un precio que en algunos casos supera de largo los 200.000.
En concreto, la puja ha subido hasta los 220.000 euros por hacerse con uno de los últimos que quedan. Y es que, en uno de sus almacenes, Twisted ha guardado celosamente durante todo este tiempo 16 ejemplares especialmente escogidos.
El propio Fawcett visitó la cadena de montaje de Solihull (Reino Unido) para conocer personalmente a los hombres y mujeres que fabricaron los Land Rover que había adquirido. Y estas 16 unidades fueron seleccionadas por su número de chasis, que certifican ser los últimos vehículos que saldrían de la línea de producción.
Edición especial One of One
Con estos coches tan especiales, el preparador ha completado una serie limitada de final de producción bautizada como One of One. Y, además de la personalización diseñada por Twisted para honrar al mítico modelo, cada unidad es adaptada en sus más mínimos detalles al gusto de cada cliente.
Todos los Defender de la serie One of One están nuevos, contabilizan menos de 50 kilómetros en su marcador y se ofrecen con un motor de gasolina o bien uno diésel. En Twisted, los coches han sido minuciosamente optimizados en cuanto a suspensión, frenos, llantas y neumáticos, además de incorporar algunos elementos extra de seguridad, como una moderna iluminación led.
Y por dentro, se ha mejorado la insonorización y se les ha dotado de tapicerías de cuero, más elegantes, y de un moderno sistema de información y entretenimiento conectado.
Todo lo anterior hace que la serie especial haya revalorizado el precio original del legendario 4×4 entre los 150.000 y 208.000 euros (sin impuestos) dependiendo de la motorización y el acabado elegidos.
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