Un Nissan Leaf disparatado: motor de combustión y 280 CV

En los últimos años, se han dado a conocer infinidad de preparaciones que han dejado sin aliento a quienes las han podido conducir. Potenciar el motor de un modelo hasta límites insospechados y bajar el peso todo lo posible son las bases fundamentales de una buena modificación.

Además, es crucial dotar al modelo de refuerzos en el chasis y mejorar las suspensiones y los frenos acorde con las nuevas prestaciones. Todas estas modificaciones suelen hacerse sobre vehículos que disponen de un motor de combustión interna y que se mejoran con un propulsor más grande. Lo insólito es utilizar la base de un coche 100% eléctrico y añadirle el impulsor de una motocicleta deportiva.

Con esta fusión de conceptos, se ha creado el automóvil híbrido más llamativo del mercado. Un Nissan Leaf, que mantiene su propulsor eléctrico característico, al que se le ha sumado el motor de una Kawasaki Ninja ZX-10R.

Nissan LeafZX

El Nissan LeafZX es la creación que surgió de la mente creativa de Derek Young. Este entusiasta de los coches e ingeniero mecánico de profesión comenzó a darle vueltas a la forma de alargar la vida de su Nissan Leaf de 2013. Al utilitario eléctrico le había llegado su final. 

Su paquete de baterías se había degradado con el paso de los kilómetros y solo disponía de una autonomía de unos 40 kilómetros con cada carga. Después de darle muchas vueltas a la manera de mantener el Leaf en la carretera, llegó a la conclusión de que había que añadirle un motor de combustión interna para convertirlo en un híbrido enchufable.

Para ello, usó el impulsor de 1.000cc de una Kawasaki Ninja ZX-10R de 2008 que rinde 160 CV. Este se encarga de dar vida a las ruedas traseras del automóvil, dejando las delanteras movidas únicamente por la electricidad. La combinación de ambos motores ofrece la cifra de 280 CV a 13.000 revoluciones por minuto.

Gran trabajo de ingeniería

Añadir un motor térmico a un coche eléctrico no es tan simple como meter el nuevo propulsor en el maletero del Nissan Leaf. La dificultad es extrema, con infinidad de modificaciones, pero gracias a los estudios de ingeniería de Derek Young, las modificaciones pudieron salir adelante.

Una de las mejoras más significativas tuvo lugar en el emplazamiento del motor de la Kawasaki, el maletero. Para acogerlo, se tuvo que modificar el subchasis trasero de un Lexus IS350 y encajarlo en la zaga del Leaf. Una vez salvó este duro escollo, pudo montar el propulsor de la motocicleta en el maletero. 

Transmitir la potencia a las ruedas traseras fue otro problema. Para ello tuvo que conectar la transmisión por cadena (como en las motocicletas) a la transmisión secuencial a través de un plato dentado que se unió al diferencial. Una vez que el motor se encontraba en su sitio, instaló una toma de aire en la ventana lateral para que el aire saliera del radiador y así refrigerar el motor.

Nueva parte de ciclo

El sistema de frenado también se tuvo que modificar. Por ejemplo, las pinzas delanteras pertenecen a un Nissan 370Z, los rotores delanteros son de un Mustang y los frenos traseros provenían del mismo Lexus IS350 que dio vida al subchasis trasero.

Las nuevas llantas están firmadas por Enkei, y se les montaron unos neumáticos de la marca Nexen. Por su parte, el tubo de escape y el depósito de combustible pertenecen a la propia Kawasaki Ninja ZX-10R.

En definitiva, este Nissan Leaf que el youtuber SuperfastMatt ha transformado en un vehículo híbrido, equipándolo con el motor de una Kawasaki Ninja ZX-10R, haría las delicias de cualquier amante de las sensaciones deportivas. Una combinación de propulsores que en modo eléctrico entrega 109 CV, en modo híbrido se eleva hasta los 284 CV y en modo de gasolina se queda en unos nada desdeñables 175 CV.