Crear e implantar la señal que informe del carril 25, rebajar la tasa de alcoholemia y que las grúas de auxilio en carretera tengan luces azules y no amarillas son algunas sugerencias de la consultora PONS Mobility a la Dirección General de Tráfico (DGT) para mejorar la seguridad vial y la fluidez circulatoria.
Esta consultora ha presentado cuatro alegaciones al proyecto de real decreto en materia de protección a usuarios vulnerables de la vía de la DGT, en fase de consulta pública y que modificará el Reglamento General de Circulación con el objetivo de mejorar los indicadores de siniestralidad vial de las carreteras españolas.
La propuesta de una nueva señal para el carril 25 nace a la vez que el propio concepto que identifica. Así, en este espacio (pensado para dar más peso y protección a la micromovilidad urbana) el conductor de una bicicleta, un patinete eléctrico o, de forma genérica, “un vehículo de dos ruedas accionado por motor eléctrico con limitación por construcción de hasta 25 km/h” tiene preferencia de paso respecto a otros vehículos.
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Como cara b de esta idea, se plantea la creación del espacio de estacionamiento 25, esto es, un lugar específico donde se permite el estacionamiento de esos mismos vehículos.
Otra de las alegaciones refleja la preocupación por el consumo de alcohol al volante. Esta sustancia estuvo presente en un 14% de los siniestros de tráfico con víctimas en 2022 y, como factor concurrente, en un 29% de los que registraron fallecidos.
Bajar la tasa de alcoholemia
Para reducir estas cifras, la consultora plantea bajar la tasa general de alcohol en sangre desde los actuales 0,50 gramos por litro a 0,20 gramos por litro. La DGT ya prevé la misma rebaja en el proyecto de reforma del reglamento, pero solo para los conductores profesionales y noveles, cuyo límite actual es de 0,30 gramos por litro (0,15 miligramos por litro de aire espirado).
Además, con el fin de reducir las cifras de peatones atropellados en autopistas y autovías, PONS Mobility apuesta por dos medidas. Una de ellas es que los vehículos de auxilio en carretera lleven luces V-1 (azules), ya que este color llama la atención de los conductores y hace que reduzcan la velocidad. Y, para llevar al papel la inercia natural de los automovilistas, la consultora solicita incluir en el reglamento la obligatoriedad de reducir la velocidad al menos en 20 km/h respecto al límite máximo allí donde haya grúas de carretera trabajando.
En la última de las alegaciones, los expertos de esta compañía proponen adelantar el uso obligatorio de las balizas V-16 conectadas, previsto para el 1 de enero de 2026, para los nuevos vehículos matriculados a partir del 1 de enero de 2025, con el fin de graduar esa medida y evitar el incremento de precios de esos productos.
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