BYD por el momento solo vende en Europa coches eléctricos, pero ya ha anunciado que a lo largo de este año debutará en el terreno de los coches híbridos enchufables con una nueva versión del Seal-U. Y está por ver si comercializará en el Viejo Continente el BYD Shark, un pick-up híbrido enchufable que acaba de ver la luz en México.
Llama la atención por su imagen, ya que BYD siempre se ha alejado del manido tópico de las marcas chinas que copian diseños, pero en este caso el parecido con el F-150 de Ford es notable, especialmente en un frontal que cuenta con unos faros que abrazan la parrilla y están unidos entre sí por una franja superior.
Por lo demás, es un modelo robusto y musculoso, que apuesta por las líneas horizontales, cuenta con voluminosas protecciones de plástico inferiores, con refuerzos de aluminio en el paragolpes delantero y dispone de barras en el techo, así como de estructuras metálicas en la caja trasera para sujetar mejor la carga.
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Parece imponente y lo es por sus dimensiones. Mide 5,45 metros de largo, 1,97 metros de ancho y 1,92 metros de alto. Sin embargo, no se han concretado las medidas del cajón trasero.
En el habitáculo la apuesta tecnológica es clara, pero dado el segmento al que va dirigido, el conjunto no es tan minimalista como en otros BYD que se han presentado recientemente.
Cuenta con un cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas, así como con una pantalla central de 12,8 pulgadas que puede cambiar su orientación entre vertical y horizontal. El sistema multimedia es compatible de manera inalámbrica con Apple CarPlay y Android Auto, cuenta con cargador por inducción para smartphones con 50W de potencia y sistema de reconocimiento de voz.
Lo más particular, sin embargo, es que integra una función de karaoke que permite cantar utilizando los móviles como micrófonos.
El motor del BYD Shark
El Shark emplea un sistema de propulsión híbrido enchufable que combina un motor 1.5 turbo con un apartado eléctrico que no se ha concretado, consiguiendo una potencia conjunta de 436 CV, lo que le permite acelerar de 0 a 100 km/h en 5,7 segundos.
Tampoco se ha desvelado cuál es su batería, pero la marca ha anunciado una autonomía eléctrica de 100 kilómetros, aunque homologados con el ciclo NEDC. Se trata de un sistema de medición mucho más laxo que el actual WLTP, por lo que su rango eléctrico real será sensiblemente inferior.
La pila es compatible con carga rápida de potencia no especificada, pero que le permite pasar del 30% al 80% de la carga en 20 minutos.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.