Cómo y dónde pagar el impuesto de circulación de 2023

La primavera es época de pagar tributos. El más importante en estas fechas es la Renta. Se deben de rendir cuentas con el fisco y presentar el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF) que grava los ingresos que se ha obtenido a lo largo de un año. 

Por su parte, además del Estado, los ayuntamientos también están en periodo de recaudación. Uno de los tributos más recurrentes que se debe de abonar anualmente es el del impuesto de circulación. Una tasa que cuenta con muchos nombres: sello, numerito o Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM).

Todos los vehículos matriculados deben abonar la tasa, inclusive los que cuenten con permisos temporales de circulación o que lleven una matrícula turística. Están exentos los vehículos oficiales, sanitarios, diplomáticos o los conductores con movilidad reducida (con un grado igual o superior al 33%).

¿Y si no llega el impuesto?

Hay ocasiones en las que el aviso con la carta de pago que envía el preceptivo ayuntamiento no llega al destinatario para poder cumplimentar el pago en tiempo y forma. Cabe recordar que el periodo para abonar esta tasa municipal comprende entre el 1 de abril y el 30 de junio. En los automóviles nuevos, se debe de abonar en la fecha de compra, sea cual sea esta.

Para reclamar la carta de pago, el usuario se debe de poner en contacto con el ayuntamiento o municipio dónde se encuentra registrado el vehículo. En la gran mayoría de consistorios se puede acceder por internet al pago de tasas municipales. Si el municipio en cuestión no dispusiera de este servicio, habría que intentarlo a través del teléfono o, por último, personarse en las dependencias municipales.

Cabe recordar que la fórmula más sencilla para acometer el desembolso del numerito, es domiciliar el pago en la entidad bancaria correspondiente. De esta manera, todos los años se pasará el pago por la cuenta del titular del vehículo y así evitará complicaciones.

Sin multa

El abono del impuesto de circulación es obligatorio, pero al ser una tasa municipal se trata de un trámite administrativo, por lo que los agentes de tráfico no pueden sancionar si el propietario del vehículo ha dejado de pagarla.

En cambio, sí que se puede estar cometiendo una infracción al no abonar el IVTM. Si se van acumulando las cartas de pago y no se hace frente al importe requerido, al llegar a los 500 euros, el consistorio tiene la potestad de embargar tanto la cuenta corriente como el propio vehículo.

Además, en caso de sufrir un accidente, puede que la compañía aseguradora rechace el pago de una indemnización al no tener al día toda la documentación del vehículo en regla. Así mismo, si se quiere vender el automóvil tampoco se podrá ejecutar hasta que no se esté al corriente de pago de todas las tasas.