El Ford Edge se renueva. Ya se aceptan pedidos para la remozada gama del SUV grande de la firma del óvalo, que incorpora sofisticados sistemas de inteligencia artificial que mejoran la tracción y seguridad en marcha, además de reducir sus consumos. Disponible en una gama compuesta por dos motorizaciones diésel, dos cajas de cambio y cuatro niveles de equipamiento, sus precios oscilan entre 46.000 y 63.000 euros.
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Fabricado en Canadá, el Edge se posiciona en Europa como el SUV más avanzado de Ford. En la nueva gama que se acaba de desvelar en Suecia, además de mostrar una imagen exterior diferente, su principal aportación son los sistemas inteligentes de ayuda a la conducción, que no sólo colaboran para proporcionar mayor seguridad y agarre en las situaciones más complicadas, sino que también disminuyen sus consumos. Mediante un sofisticado equipo de sensores se procesan los datos en 10 milisegundos para cambiar de tracción delantera a tracción total cuando las condiciones de agarre así lo requieren.
En condiciones de conducción favorables, el nuevo Edge permanece en el modo de tracción delantera, lo que ayuda a mejorar la eficiencia del combustible. Sin embargo, cuando las condiciones de conducción son más exigentes, cambia inmediatamente a la tracción inteligente a las cuatro ruedas, proporcionando un agarre optimizado.
Todo ello propicia un ahorro de un 6,5% en el consumo de combustible en las dos motorizaciones 2.0 diésel de 190 y 238 CV. La primera de ellas está asociada a una caja de cambios manual de 6 velocidades, mientras que el propulsor más potente, que es biturbo, estrena una nueva transmisión automática de ocho velocidades. Esta última dispone de un sistema de calentamiento activo que utiliza la energía térmica recuperada para alcanzar la temperatura óptima de manera más rápida.
Se incorpora un nuevo nivel de equipamiento denominado ST-Line, que ofrece una imagen más deportiva y algunos cambios en los reglajes para ofrecer un comportamiento más dinámico. Se mantienen los equipamientos Trend y Titanium, mientras que las versiones Vignale se colocan en el escalón más alto de equipamiento y confort. Otra de las novedades de la nueva gama es el sistema de sonido Bang & Olufsen con 12 altavoces, que alcanza los 1.000 watios de potencia.
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