Este Acura NSX, que parece sacado de la serie de tanto éxito The Last of Us, solo tiene 62.800 kilómetros, pero ha pasado 20 años en el fondo de un río en Carolina del Norte (Estados Unidos).
El modelo es otra buena prueba de que el mercado de coches de segunda mano siempre puede dar sorpresas. A pesar del estado en que se encuentras, se ha vendido por 8.000 euros.
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Decir que este coche ha tenido una vida dura es decir poco. El NSX fue encontrado por accidente en 2019 mientras unos buzos de la Policía buscaban un vehículo implicado en otro delito.
Tras sacarlo del agua, se descubrió que el coche llevaba desaparecido desde los años noventa, cuando fue robado. En esa época, las autoridades ya habían supuesto que el coche estaba en el río Yadkin, en Carolina del Norte, pero entonces no se encontró.
El resultado del hallazgo es un coche que incluso el vendedor consideró demasiado deteriorado para restaurarlo.
Peor que mal
Además del lamentable estado general, al NSX le falta el motor, las ventanillas están rotas, el interior se ha convertido en un jardín y la bandeja trasera está llena de arena.
Inicialmente se puso a la venta por 5.600 euros, pero en el frenesí de la puja, el precio alcanzado ha sido de 8.000 euros.
Taylor Hughes de Randleman, Carolina del Norte (que trabaja para el desgüace que vende el coche), también publicó que el coche se había adjudicado después de una guerra de ofertas. El coche se ha vendido a un comprador de Maryland que, al parecer, va a intentar restaurarlo.
De momento, todo esto confirma que el NSX de primera generación se ha convertido en todo un icono clásico, por la cantidad de gente que, como se ha demostrado con este tesoro, está dispuesta a pagar por hacerse con uno.
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