Toyota no deja de hacer crecer la gama de un Corolla que ya es bastante más amplia que la que su predecesor, el Auris, tuvo jamás: el sedán se ha estrenado por primera vez en España, al familiar le ha salido una variante campera denominada Trek y al cinco puertas, la carrocería central del modelo, ahora le llega el nivel de equipamiento GR-SPORT.
Como su nombre indica, busca darle una orientación más deportiva al híbrido, algo que consigue sobre todo en cuanto a imagen. La parrilla de este acabado es específica, así como los faldones y el difusor trasero, y calza llantas de aleación de 18 pulgadas. El logo de Toyota tiene fondo en negro, en lugar de azul como ocurre en todos los híbridos de la marca, lleva los cristales traseros tintados y está disponible en un color exclusivo, el Gris Ascari, con el techo en tono negro de contraste.
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Esa deportividad también está presente en un interior en el que las costuras de volante, palanca de cambios y alfombrillas son negras y rojas. Cuenta también con el logo de la versión en los umbrales de las puertas y lo más llamativo son los asientos, de tapicería mixta y con un mayor apoyo lateral.
A pesar del dinamismo que imprime su imagen, no se ha aumentado la potencia del sistema híbrido de 184 CV (el único con el que está disponible la nueva versión), aunque sí se puede instalar, previo pago de 1.200 euros, la suspensión adaptativa Adaptive Variable Suspension (AVS) que modifica su dureza en 20 milésimas de segundo.
El Toyota Corolla GR-SPORT ya está disponible en España por un precio de partida de 26.300 euros, lo que le integra en la gama entre los niveles de acabado Feel! y Advance.
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