Pere Navarro, de nuevo al frente de la Dirección General de Tráfico (DGT), ya ha dejado muy claro que una de las prioridades de esta su segunda etapa al frente de la entidad será luchar contra las distracciones al volante, una lacra moderna de la circulación. Muchos son los conductores que dedican más atención a sus teléfonos móviles que a la carretera, con el evidente riesgo que ello representa. Un ejemplo más es el que denuncia la propia DGT en la última edición de su revista ‘Tráfico y seguridad vial’.
En este caso, la colección de infracciones que comete el automovilista grabado desde el helicóptero de la Guardia Civil es para enmarcar y se aprecian a la perfección al tratarse de un Audi descapotable. Un joven circula a gran velocidad por el carril izquierdo de una autovía, estando libre el de la derecha, con lo que acumula las dos primeras irregularidades. Conduciendo con el torso desnudo, lleva un teléfono móvil en el regazo mientras maneja con su mano derecha otro dispositivo.
A unos 150 km/h la operación se prolonga durante algunos segundos, puesto que el automovilista graba un vídeo con el móvil tanto a él mismo como a sus acompañantes. Incluso suelta ambas manos del volante durante unos instantes para llevar con las manos el ritmo de la música que, supuestamente, debe sonar en el equipo de audio del vehículo.
Todo ello quedó perfectamente documentado por las imágenes desde el helicóptero y supuso una sanción de 500 euros y la pérdida de 6 puntos del carnet.
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