El peligro oculto de los SUV: la advertencia de la OCU sobre los coches de moda

El mercado del automóvil en España está dominado por los SUV, tanto por la oferta cada vez mayor que hacen las marcas como por unas cifras de ventas que lideran sin rival. Sin embargo, el aumento de su presencia en las carreteras tiene un claro perdedor, el medioambiente.

Así lo apunta la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que señala dos características básicas de los todocaminos como rasgos que hacen que sean menos eficientes.

Por un lado, son modelos de mayor tamaño que compactos o berlinas de segmento equivalente, sobre todo en lo referente a la altura, lo que hace que tengan una peor aerodinámica y que tanto su consumo como emisiones sean mayores.

Por otro, son coches más pesados, lo que también penaliza la eficiencia, además de que hace que aumente el desgaste de los neumáticos y del propio asfalto, e incluso hace que aumente el peligro de derrumbe de aparcamientos, por ejemplo.

Es más, a la hora de aparcar, el aumento del ancho también supone un problema, ya que las plazas de estacionamiento más antiguas fueron concebidas para vehículos de dimensiones más reducidas.

Además, el dominio de los todocaminos es una tendencia al alza que no tiene visos de cambiar. En lo que va de 2023, los SUV compactos son el tipo de coche más vendido, suponiendo un 28,4% de las matriculaciones, y les siguen los SUV pequeños con un 23,1%. A esto se suma, aunque a bastante distancia, que los SUV grandes, la categoría más voluminosa y pesada en la actualidad, alcanzan ya un 9,7% de cuota de mercado.

Esto relega a un segundo plano a modelos equivalentes, que podrían cubrir necesidades similares, pero siendo más ligeros y eficientes. Utilitarios (16,6%) y compactos (12,9%) aguantan el ritmo a duras penas, mientras que alternativas clásicas a los SUV grandes, como los monovolúmenes (1,4%) han desaparecido virtualmente del mercado.

Todos los coches son más grandes

Pero el predominio de los SUV no es el único factor en este problema, y es que atendiendo al mercado en general, todos los coches van creciendo respecto a sus generaciones previas, hasta el punto de que se ha asistido a un sorpasso entre segmentos: los utilitarios de 2023 son de tamaño similar a los compactos de hace un par de décadas.

La OCU señala algunos ejemplos bastante claros en coches muy populares. El modelo más vendido en lo que va de año es el Dacia Sandero, un utilitario que tiene una longitud de 4,09 metros, sensiblemente superior a lo que medía en 2003 un Seat Ibiza: 3,71 metros. También es mayor su peso, con 1.125 kilos, por los 1.040 del Seat.

Esto hace que el Dacia se encuentre a una distancia parecida de lo que medía un Renault Mégane en 2003, 4,21 metros, cuando este modelo pertenece a la categoría de los compactos. Pero ¿cuánto mide el modelo francés actual? Llega a los 4,35 metros y su peso se acerca a la tonelada y media.

El crecimiento y aumento de peso es generalizado en todos los segmentos, pero donde más se nota la evolución es en los de acceso y medios, que son los que concentran más ventas de automóviles.