Hay marcas que, conscientes de la importancia que tiene su pasado, cuidan con mimo sus modelos más antiguos. Ofrecen a sus propietarios servicios de restauración e, incluso, vuelve a fabricar piezas para que no recurran a marcas blancas o imitaciones. Un proceso que no es sencillo.
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Mercedes es un buen ejemplo de ello. La marca alemana acaba de incorporar a su catálogo de piezas para clásicos el pomo del freno de mano que instaló en modelos como el Mercedes SL (R107) y el Mercedes Clase S (W116). Vehículos que fueron fabricados durante los años setenta
En muchos Mercedes antiguos, el freno de mano se activaba pisando un pedal con el pie izquierdo y se liberaba tirando de una perilla, que se encontraba en el lado izquierdo del salpicadero.
Ese botón iba atornillado a una varilla y, con el paso del tiempo y la variación de temperaturas que se dan en el habitáculo, tiende a agrietarse. Sin él, quitar el freno de mano es tan complicado como molesto.
¿Existe todavía el proveedor?
Cuando se trata de reproducir componentes para sus coches clásicos, Mercedes, en primer lugar, identifica cuáles están a punto de extinguirse en su inventario o y cuáles ya están agotadas.
Es entonces cuando se pone en contacto con el proveedor que fabricó la pieza, si es que sigue existiendo. Si sigue en activo, a veces es posible que no quiera invertir tiempo y dinero en reproducir algo que no generará una gran cantidad de volumen.
En estos casos, Mercedes tiene que encontrar un nuevo proveedor. Eso es lo que ha ocurrido en esta ocasión: el fabricante original hizo el último lote de pomos en 1975. Como había suficiente demanda para reproducirla, a finales de 2022, la marca alemana comenzó a buscar un nuevo distribuidor… y lo encontró.

Dos años para una pieza
El primer lote de pomos para el freno de mano estuvo listo, aproximadamente, dos años después. Reproducir piezas requiere mucho trabajo: es un proceso que lleva varios meses e, incluso, años.
No se ha revelado quién fabrica la nueva pieza, pero Mercedes-Benz Heritage ha confirmado a The Drive que, en términos de tacto, función y calidad, es igual que la original. En las fotos se ve perfecta.
Como todas las reproducciones, antes de recibir luz verde, el pomo se sometió a numerosas pruebas en el mundo real para garantizar que cumple con los mismos estándares que una pieza de repuesto para un modelo nuevo o más reciente de Mercedes.
Para sus clásicos, la firma de Stuttgart ya ofrece una gama con más de 160.000 piezas. En el caso concreto del pomo del freno de mano de modelos como el Mercedes SL (R107) y el Mercedes Clase S (W116), está disponible en todo el mundo, han fabricado varios miles de unidades y su precio es de 50 euros, sin impuestos ni gastos de envío.
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