Muchas películas de acción cuentan con escenas de persecuciones o huidas en coche que dejan bastantes unidades maltrechas en el transcurso de la escena. Y cuando los cineastas cuentan con grandes presupuestos y una escena de persecución de coches que rodar, a veces la destrucción es masiva.
Estas son las películas que más coches han enviado al desguace.
‘Bullitt’
- 80 coches destruidos
La persecución de coches de Bullitt está considerada como una de las mejores jamás producidas.
El icónico Mustang alcanzó velocidades de más de 160 km/h durante el rodaje, a veces incluso con el propio Steve McQueen al volante, en su huida de dos sicarios a bordo de un Dodge Charger de 1968.
‘60 segundos’
- 93 coches destruidos
La película 60 segundos ha recaudado más de 40 millones de dólares en todo el mundo.
H.B. Halicki produjo, protagonizó y dirigió la película, y fue él quien condujo a Eleanor (el Mustang del 73) durante toda la escena de la persecución.
Pero cuando Halicki chocó con un coche a 160 km/h, acabó en el hospital tras terminar la secuencia contra una farola. La toma se dejó en la película.
![Gone In 60 Seconds |2000| All Eleanor Pursuit Scenes [Edited]](https://i.ytimg.com/vi/14Pl4U8NZog/hqdefault.jpg)
‘Granujas a todo ritmo’
- 104 coches destruidos
Para la persecución principal de esta película, se compraron 60 coches de Policía por 400 euros cada uno, y se equiparon con chasis reforzados. La mayoría de ellos no se pudieron salvar cuando terminó el rodaje.
En “misión de Dios”, Jake y Elwood Blues consiguen evitar a las fuerzas del orden y a los neonazis por igual por las calles de Chicago y sus alrededores, con la consiguiente carnicería que acabó con las seis decenas de coches policiales.
El Bluesmobile que conducían sobrevivió hasta la última escena, cuando se deshizo en un montón de piezas frente al Ayuntamiento.
‘Blues Brothers 2000 (El ritmo continúa)’
- 105 coches destruidos
The Blues Brothers, el título original de Granujas a todo ritmo, ostentaba el récord de coches destrozados hasta que esta secuela, bastante peor que la original, destruyó deliberadamente uno más.
‘G.I. Joe’
- 112 coches destruidos
G.I. Joe (dirigida por Stephen Sommers) tuvo en el pasado el récord del mayor número de coches destruidos durante una película, y superó a The Blues Brothers 2000 por ocho vehículos.
‘Un buen día para morir’
- 132 coches destruidos
Si alguna vez hubo una película que no necesitara una secuela, y mucho menos cuatro, fue La Jungla de Cristal.
25 años después de que John McClane entrara por primera vez en el Nakatomi Plaza, se produjo la quinta entrega. Y en el rodaje de esta película 132 vehículos fueron destruidos y otros 518 resultaron muy dañados. ¿La factura? 8,4 millones de euros.
‘El chatarrero (The Junkman)’
- 150 coches destruidos
El chatarrero, o The Junkman en su título original, no es de esas películas famosas que todo el mundo recuerda.
Dispuesto a eclipsar el récord que estableció con 60 Segundos, H.B. Halicki habría destrozado más de 150 vehículos en su realización.
‘Fast & Furious 5’
- 260 coches destruidos
En total, se han destruido más de 1.000 coches desde la primera película de esta famosa saga, Fast & Furious, es decir, más de uno cada minuto.
Hasta 260 de esos coches fueron destrozados en esta, la quinta película.
‘Matrix Reloaded’
- 300 coches destruidos
Los hombres y mujeres que hubo detrás de la realización de Matrix Reloaded, la segunda parte de la famosa Matrix, se las arreglaron para amortizar la enorme cantidad de 300 coches que les prestó General Motors, gracias a una recaudación récord. Además, la inteligencia artificial también tuvo una buena dosis de trabajo.
‘Transformers 3’
- 532 coches destruidos
Técnicamente, cada uno de los 532 coches destruidos en el rodaje de Transformers 3 iba camino del desguace. Y es que estaban dañados por las inundaciones y fueron donados al director Michael Bay.
Hasta el momento, ninguna otra película ha destrozado tantos coches en su rodaje. O por lo menos, coches reales.
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Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.