Ahora que los coches de segunda mano han subido de precio y las marcas tardan en entregar sus modelos nuevos, por efecto, entre otras causas, de la crisis de microchips, los más pacientes tienen una alternativa no tan conocida y con posibilidad de buenas oportunidades: las subastas de coches.
Sin un ritmo constante ni predecible, en el portal del Boletín Oficial del Estado se venden coches seminuevos, viejos y medio viejos con precios de salida a veces muy económicos. Por ejemplo, un Porsche Macan S de 2014 por 14.504 euros. La letra pequeña llega después.
Subasta de coches
Todos los vehículos (también hay camiones, furgonetas y motos) proceden de embargos por deudas con ayuntamientos, la Agencia Tributaria, la Seguridad Social o los bancos, y los compradores, si no tienen prisa, solo deben esperar a que aparezca uno que les interese. A sabiendas, eso sí, de que se entregan tal como están y sin garantía.
Si no se quiere prestar atención constante al asunto, el portal AlertaSubastas permite personalizar la búsqueda para recibir un aviso cuando un coche se ajuste a las necesidades.
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Después, lo que queda es la puja, un asunto que se resuelve por internet desde el principio hasta el final. En algunos casos los vehículos se pueden visitar, pero no probar: están precintados judicialmente o custodiados por los acreedores, así que la decisión de compra dependerá de la intuición y de la confianza en una revisión mecánica a la que se someten los vehículos antes de la subasta.
Cómo se puja
Solo los usuarios registrados tienen posibilidad de pujar, para lo cual necesitan un certificado digital reconocido o alguno de los mecanismos de identificación del sistema Cl@ve (Cl@ve PIN o Cl@ve Permanente).
Quienes estén registrados pueden “participar como postores”, ver los detalles no públicos de las subastas y recibir avisos que se ajusten a sus intereses. Si no hay premura por comprar un coche de segunda mano, probablemente aparezcan buenas oportunidades.
La página de bienvenida del portal de subastas muestra un mapa de España que permite filtrar por provincias y tipos (inmuebles, bienes muebles o vehículos). Además, el sistema de búsqueda avanzado también divide las subastas por su origen (judicial, notarial o tributario, entre otros) y por el estado en que se encuentran (si cerrada, abierta o de próxima apertura).
Requisitos del portal de subastas del BOE
Para la mayoría de las subastas no hay otro requisito que contar con el dinero que se quiera invertir, aparte de adelantar una cantidad como depósito, que se recupera en caso de que no se gane la puja. Lo que sí deja claro el portal es que las pujas confirmadas “no pueden ser retiradas ni modificadas”.
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Antes de hacer una oferta conviene solicitar un informe completo a la DGT (8,59 euros), que engloba toda la información disponible: identificación del titular, municipio donde está domiciliado el vehículo, historial de la ITV, kilometraje y cargas, así como datos técnicos, puntuación Euro NCAP e historial de reparaciones (si se han realizado en talleres que usen el libro digital de mantenimiento).
Quienquiera que vaya a utilizar este sistema, en todo caso, debería informarse a fondo sobre el modo de uso (en la sección de ayuda del portal) y fijarse con atención en los detalles. El Porsche Macan del principio –que se puede ver, pero no probar–, con matrícula 6391JFH, tiene 274.783 kilómetros.
De su estado real, según la descripción de la web del BOE, solo se sabe lo que se ve: “Presenta algunos arañazos y abolladuras”. El coche está tasado en 14.504 euros, pero no hay una puja mínima para la subasta, que se cierra el 23 de noviembre.
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