Todos los coches nuevos salen de fábrica homologados, según especifica la legislación en vigor. Y con el paso del tiempo deben respetar la normativa del Manual de Inspección ITV (RD 920/2017) donde, entre otras cosas, se especifica cada cuánto tienen que pasar por la ITV los vehículos.
Pero si después se modifica cualquier componente mecánico, eléctrico o incluso estético, también tiene que cumplir con la legislación vigente. Y para saber si se cumple o no, hay que fijarse en el Manual de Reformas de Vehículos.
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¿Qué es el Manual de Reformas?
Es un documento expedido por el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad y que especifica las modificaciones que se pueden hacer en un vehículo en España.
Detalla los criterios permitidos además de la documentación necesaria y los requisitos a cumplir para realizar la tramitación de las reformas.
Este manual está dividido en cuatro secciones:
- Vehículos de las categorías M,N y O (aquí entran los turismos, que son los M1).
- Vehículos de categorías L (motocicletas), quads y UTV.
- Vehículos agrícolas.
- Vehículos de obras y/o servicios.
Cada sección está dividida a su vez en 11 grupos o funciones:
- Identificación.
- Unidad motriz.
- Transmisión.
- Ejes.
- Suspensión.
- Dirección.
- Frenos.
- Carrocería.
- Dispositivos de alumbrado y señalización.
- Unión entre vehículos tractores y sus remolques o semirremolques.
- Modificación de los datos que aparecen en la tarjeta ITV.
A su vez, cada grupo está organizado por códigos de reformas que identifican las modificaciones realizadas en los vehículos. Además, también se explica la documentación que va a ser necesaria presentar según el tipo de reforma que se realice:
- Proyecto técnico.
- Certificado de dirección final de obra.
- Informe de conformidad.
- Certificado del taller.
- Documentación adicional.
- Conjunto funcional.
Esta documentación se puede solicitar bien a una empresa especializada en homologaciones de vehículos o en diferentes empresas como un taller, un proyectista o un laboratorio, según cuáles sean los requisitos y documentos a presentar.
Pero, como indica el RACE (Real Automóvil Club de España), no siempre esas modificaciones se catalogarán como reforma y no habrá que presentar, por lo tanto, toda la documentación descrita. El propio manual detalla en qué casos se debe presentar unos papeles u otros. Pero lo mejor, como casi siempre, es consultar con algún profesional.
A continuación, el RACE indica algunos ejemplos de cuándo se considera o no una reforma:
Se considera reforma | No se considera reforma |
Instalar un portaequipajes anclado en lugares distintos a los previstos por el fabricante del vehículo. | Pintar el coche. |
Instalar una bola de remolque. | Instalar un soporte de rueda de repuesto en los bajos del vehículo. |
Modificar el motor y reprogramar la centralita o ECU. | Poner un embellecedor al final del tubo de escape. |
Poner las lunas tintadas en el coche. | Colocar molduras no metálicas instaladas mediante adhesivos. |
Colocar un paso de rueda ensanchado o instalar un neumático que no corresponde con lo indicado como alternativa en la ficha técnica. | Instalar deflectores de aire en las ventanas. |
Instalar equipos de aire acondicionado en el exterior si la transformación afecta a la estructura. | Instalar un sensor de aparcamiento. |
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Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.