Mercedes, como otras tantas marcas, está electrificando su gama a pasos acelerados. Ahora le toca el turno a su familia de compactos, con los Mercedes Clase A y A Sedán recibiendo sendas versiones híbridas enchufables técnicamente idénticas entre sí.
Ambas utilizan un sistema de propulsión que combina un motor de gasolina 1.33 de 160 CV con un bloque eléctrico que aporta otros 75 kW (102 CV). Así, desarrollan una potencia total de 218 CV y un par máximo de 450 Nm, transmitidos exclusivamente a las ruedas delanteras a través de una caja de cambios automática 8G-DCT de doble embrague y ocho velocidades.
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Gracias a ello, el Clase A PHEV es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,6 segundos y el Sedán en 6,7, alcanzando una velocidad máxima de, respectivamente, 235 y 240 km/h.
Al sistema le suministra energía una batería de 15,6 kWh, lo que le otorga una autonomía eléctrica de entre 64 y 72 kilómetros (entre 65 y 73 para el sedán), pudiendo alcanzar hasta 140 km/h en dicho modo. Con un Wallbox de 7,4 kW se recarga al completo en 1 hora y 45 minutos, mientras que con una corriente continua rellena el 80% de su capacidad en solo 25 minutos.
Esto le permite obtener la etiqueta ECO y homologar un consumo de entre 1,4 y 1,5 litros en el caso del compacto y de entre 1,3 y 1,4 litros en el Sedán, así como unas emisiones de entre 33 y 34 g/km y entre 31 y 33 g/km de CO2 en cada caso.
El precio del Mercedes Clase A híbrido enchufable parte de los 39.350 euros, mientras que el Sedán tiene un punto de partida ligeramente más elevado, 40.150 euros.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.