Nuevo Mazda3: así se crea un coche pensando en los conductores

La filosofía Jinba Ittai de la marca, que busca que el conductor interactúe con el coche de manera natural, ha cristalizado en el concepto Skyactiv Vehicle Architecture.

Nuevo Mazda3

Mazda3: un coche que se adapta a las personas.

De la misma manera que nos sentimos incómodos cuando un traje no es de la talla adecuada, es imposible conducir de manera natural un coche que no se haya diseñado teniendo como elemento central el cuerpo humano. Esa es precisamente la filosofía que Mazda aplica a sus modelos, incluido el nuevo Mazda3: el Jinba Ittai, concepto japonés que alude a la unidad de coche y conductor en perfecta armonía, pretende que el conductor disfrute de la conducción sin necesidad de realizar ningún esfuerzo consciente, que sea algo orgánico para él.

Esta forma de entender el automóvil se traduce en Skyactiv Vehicle Architecture que, tras estudios exhaustivos sobre la anatomía, el comportamiento y los movimientos de las personas, aplican los datos recopilados para mejorar una gran cantidad de áreas en el nuevo compacto japonés.

La postura ideal

Sentados al volante, estar incómodos es algo que pasa factura: resta atención y hace perder capacidad de reacción. Es por ello que los asientos del nuevo Mazda3 se han diseñado para que se mantenga la curvatura natural en forma de S que la columna tiene al caminar. Una postura en la que el cuerpo cuenta con una sujeción perfecta, por lo que el ocupante percibe una menor fatiga incluso cuando se trata de trayectos largos.

Para conseguirlo hay que atender a varios importantes factores. La elasticidad de los materiales debe ser la correcta: si son demasiado blandos no sujetarán el cuerpo, demasiado duros y afectarán la circulación sanguínea, provocando molestias.

El nuevo diseño del asiento ayuda a recoger al usuario y los apoyos laterales hacen que descanse, la base es clave para sujetar la pelvis y tener un buen punto de apoyo. Se incluye, además, la posibilidad de modificar el ángulo de la parte delantera del mismo para conseguir una mejor adaptación a las piernas y un apoyo firme.

Todo siempre al alcance

Una vez integrado con el asiento del Mazda3, el conductor puede disfrutar de la nueva distribución de elementos en el puesto de conducción, ahora incluso más accesibles. Para empezar, se ha aumentado la capacidad de ajuste del volante a 70 milímetros, 10 más en cada sentido, con lo que las personas más bajas pueden acercárselo más y las altas alejarlo, evitando estrecheces y logrando una postura más relajada.

Otro punto al que se ha dedicado especial atención es a la consola central y los controles situados por debajo de ella. Ésta se ha llevado hacia adelante, dando una mayor sensación de amplitud y colocándose en un punto en el que el conductor no tiene que desviar la atención de la carretera para ver los datos que ofrece.

Por lo que respecta a la columna central entre los asientos anteriores, se ha adelantado la posición de la palanca de cambios y del mando giratorio de control, con lo que se consigue que el brazo forme un ángulo mucho más relajado, a lo que se suma un reposabrazos que proporciona un apoyo más firme.

Visibilidad máxima

Un conjunto de decisiones de diseño tomadas por Mazda ha conseguido ampliar la visibilidad de quien se encuentra al volante del nuevo Mazda3. Así, se ha reducido la anchura de los pilares A (los delanteros), minimizando así los puntos ciegos del conductor. Del mismo modo crece el área de barrido de los limpiaparabrisas, aumentando la visibilidad en condiciones adversas, mientras que la distribución de los elementos del puesto de conducción está pensada para ayudar a tomar mejor las referencias de todo aquello que rodea al usuario.

La experiencia se completa con una visión clara de todo lo que sucede alrededor del vehículo, especialmente durante la noche, gracias a los nuevos faros Smart Full LED Adaptativos (ALH). Un conjunto de 20 bloques de LED que se combinan para ofrecer una potente iluminación bajo cualquier circunstancia y sin deslumbrar a los conductores de otros vehículos, adaptándose automáticamente al campo visual del conductor.

Todo el conjunto realza la experiencia Jinba Ittai, ya que permite ofrecer al conductor un entorno de conducción cómodo, ergonómico, lógico y relajado que le ayuda a concentrarse mientras disfruta al máximo de la experiencia de la conducción.

Más información sobre el nuevo Mazda3.

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