Repostar gasolina puede cambiar tu vida estas Navidades: 400.000 euros te esperan

Repsol quiere celebrar la Navidad a lo grande y lo hace con una campaña que promete revolucionar la experiencia de sus clientes: el Gran Premio de Waylet. Esta iniciativa, dirigida a particulares mayores de edad, premiará la fidelidad de quienes utilicen la aplicación Waylet para sus pagos. ¿El incentivo? Nada menos que 400.000 euros para un único ganador, el mismo premio que ofrece un décimo del primer premio de la lotería navideña.

Por cada euro gastado a través de Waylet, el usuario obtiene una participación para el sorteo. Cuantas más operaciones realice, mayores opciones tendrá de llevarse el premio. La promoción abarca prácticamente todo el ecosistema Repsol: repostajes, compras en las tiendas, recargas de movilidad eléctrica, lavados, aparcamientos, bombonas de butano, gasóleo para calefacción e incluso pagos en marcas asociadas que aceptan Waylet, con la única excepción de los establecimientos del Grupo El Corte Inglés.

La campaña ya está activa y durará hasta el 21 de diciembre en todo el territorio nacional. El sorteo se celebrará el 22 de diciembre ante notario, y el ganador deberá cumplir con los requisitos establecidos en las bases legales.

Lanzada en 2017, Waylet se ha consolidado como una de las aplicaciones más completas del sector energético y de movilidad, con más de 9,7 millones de usuarios registrados. Además de pagar de forma rápida y segura en las estaciones de servicio Repsol, permite repostar sin pasar por caja, gestionar la recarga del vehículo eléctrico, contratar servicios de lavado y aspirado, abonar tickets de estacionamiento regulado en más de 22 localidades y comprar en una amplia red de comercios físicos y online. Todo ello, generando saldo para ahorrar en futuras compras.

Esta campaña no solo busca premiar la fidelidad, sino también reforzar la apuesta de Repsol por la digitalización y la movilidad sostenible. Waylet se ha convertido en una herramienta clave para integrar servicios que facilitan la vida del conductor moderno, desde el repostaje tradicional hasta la recarga eléctrica.