El precio de la gasolina y del diésel ha experimentado una ligera subida respecto a las cifras registradas a inicio de junio. El coste por litro de combustible supera los 1,4 euros y también afecta al GNC y el biodiésel, que también se encarecen respecto a las semanas anteriores.
Existen diversas webs y aplicaciones que permiten consultar en tiempo real el precio del combustible. Una de ellas es dieselogasolina.com, que recoge la información que publica regularmente el Geoportal de Hidrocarburos del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco).
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El precio de la gasolina a fecha 14 de junio supera los 1,6 euros. Para la gasolina sin plomo 95, el coste de queda en 1,622 euros por litro de media, manteniéndose respecto al día anterior. En el caso de la sin plomo 98, la cifra sube a los 1,807 euros por litro, encareciéndose.
En el caso del diésel, el coste del gasóleo A sube a los 1,456 euros por litro. El gasóleo A+, crece hasta llegar a los 1,57 euros por litro. Los combustibles diésel de menor calidad también han experimentado subidas de precio.
Los combustibles alternativos como el GNC o el biodiésel también han experimentado subidas de cara al cierre de la semana, al contrario que el GLP, que se ha mantenido con un precio similar. El GNC está en 1,245 euros por litro y el biodiésel, en 1,409 euros. Por otro lado, el GLP se mantiene en los 0,946 euros por litro, siendo el combustible más económico ahora mismo en el mercado.
Consejos para ahorrar combustible
Esta subida del precio de la gasolina y otros combustibles afecta a los conductores que empiecen ya sus primeros viajes del verano. No obstante, además de buscar las gasolineras más baratas por ubicación, se puede rebajar el consumo de combustible del coche aplicando técnicas de conducción eficiente.
Ahora que se viaja más por carretera con el coche, controlar el exceso de peso en el maletero es un buen truco para reducir el consumo de combustible. Del mismo modo, limitar el uso que se hace el aire acondicionado del vehículo ayudará a ahorrar en gasolina. Controlar la velocidad de conducción y aprovechar la inercia del coche en, por ejemplo, las bajadas también ayudará a aliviar el gasto en carburante.
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