Aunque aquí nos suene a chino (quizá lo más apropiado sea a japonés), en Japón los kei car son un icono y el segmento predominante. Pequeños, ágiles y de poca potencia, son el tipo de coches perfecto para desenvolverse en ciudades atestadas de vehículos.
Parece, por sus características, que son modelos pensados anodinos pensados simplemente para llevarnos de un sitio a otro procurando gastar lo menos posible y transmitiendo poco o nada al volante. Nada más lejos de la verdad. A su alrededor los nipones han generado un enorme mundillo de tuning y preparaciones, con ejemplos de los más extravagantes. Además, las marcas son conscientes de su éxito y no dudan en lanzar versiones exclusivas de sus modelos.
Es el caso de Suzuki con el Alto, que tras mostrar una variante deportiva en formato concept hace relativamente poco, ya está como en los concesionarios como modelo de producción bajo el nombre de Alto RS Turbo.
Hay que reconocer que, pese a la estética peculiar que lucen la mayoría de los kei cars, es bastante ‘pintón’ o, al menos, que Suzuki ha sabido añadirle todo lo que vemos normal en una versión deportiva. Con el color base de la carrocería en blanco, resaltan los elementos de contraste en rojo como las carcasas de los retrovisores, los vinilos laterales o el labio delantero (¿alguien ha dicho Nismo?); estrena un paragolpes específico, la entrada de aire situada junto al faro es nueva y calza llantas negras.
Dentro sigue la temática ‘sport’, con el negro como color predominante, numerosas molduras rojas, costuras de contraste del mismo color en los asientos de tela y un volante deportivo.
Lo curioso lo encontramos en la parte mecánica y es que, este Alto RS Turbo utiliza exactamente el mismo motor 0.7 sobrealimentado de 67 CV y 98 Nm de par que monta el Suzuki alto normal. Todo tiene su explicación, y es que por legislación los kei car no pueden superar dicha potencia. Por eso en Suzuki han mejorado otras áreas, como la velocidad de respuesta del turbo, desarrollos más cortos en las marchas, dirección con asistencia variable, suspensiones más duras y una altura libre al suelo rebajada. Por último, y esto es algo que sorprende, puede combinarse tanto con tracción delantera como con total.
Si a esto le sumamos un precio bastante asequible, que al cambio es de unos 10.000 euros, es de esperar que este ‘deportivo’ Alto RS Turbo se verá bastante por las calles japonesas.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.