Zona de bajas emisiones de Bilbao: los coches más viejos empiezan a sufrir más restricciones

Bilbao afrontará un cambio sustancial en su tráfico urbano a partir del 1 de enero de 2026, cuando finalicen las últimas excepciones que todavía permitían a muchos vehículos sin distintivo ambiental circular por los barrios de Abando e Indautxu.

La fecha marcará un nuevo hito en el desarrollo de la zona de bajas emisiones (ZBE), cuya implantación progresiva comenzó hace casi dos años y que ahora entra en una etapa más estricta con el objetivo declarado de mejorar la calidad del aire y consolidar una movilidad más sostenible.

Aunque el Ayuntamiento no ha ofrecido cifras concretas sobre cuántos conductores se verán afectados a partir de Año Nuevo, fuentes municipales explican que la decisión responde al calendario aprobado en 2024 y que el sistema de control –basado en una treintena de cámaras y un registro digital de permisos puntuales– permitirá supervisar el tránsito desde el primer día de aplicación sin necesidad de fases adicionales de adaptación.

Coches sin etiqueta

Las nuevas limitaciones afectan especialmente a los vehículos catalogados como A, es decir, los más antiguos del parque móvil. Hasta ahora podían acceder por motivos muy diversos: mudanzas, visitas a hoteles, trabajos puntuales de reparto, invitaciones de residentes o estancias en talleres mecánicos.

A partir de enero, sin embargo, únicamente se admitirán cuatro supuestos muy restringidos:

• Personas mayores de 70 años con parcela de garaje.
• Vehículos asociados a inversiones técnicas adicionales.
• Actividades o eventos extraordinarios autorizados previamente.
• Accesos motivados por consultas o tratamientos médicos.

Estas exenciones continuarán vigentes hasta 2030, año en que se evaluará su continuidad.

La evolución de la ZBE evidencia un cambio progresivo en la circulación. Cuando la medida se activó el 15 de junio de 2024, únicamente se prohibió entrar a los vehículos sin etiqueta ambiental. Tras un año de transición, el 16 de junio de 2025 se amplió la restricción a los coches con distintivo B, lo que supuso el mayor recorte en accesos desde el inicio de la ordenanza.

Esta ampliación coincide con un descenso sostenido del volumen de tráfico: según datos municipales publicados en noviembre y recogidos por El Correo, la entrada media diaria a los barrios de Abando e Indautxu cayó de 53.709 vehículos entre junio y septiembre de 2024 a 49.306 en septiembre de 2025, una reducción del 8%.

El impacto también se percibe en la composición del tráfico: los automóviles con etiqueta C representan ya más de la mitad de los accesos (54,5%), mientras que los ECO y Cero continúan creciendo.