Hace tiempo que BMW señaló el X3 como el próximo integrante de su familia de coches eléctricos, e incluso dio a conocer que su nombre sería iX3 (siguiendo la senda del i3 y del híbrido i8). Hasta ahora, sin embargo, no había entrado en detalles sobre su sistema de propulsión.
El BMW iX3 empleará la quinta evolución de la tecnología eDrive de la marca alemana, en la que el motor eléctrico, la electrónica del sistema y la transmisión están juntas en una carcasa central. Esto reduce tanto el espacio que ocupa como su peso, permitiendo aumentar hasta en un 30% la relación peso/potencia del propulsor respecto a la generación previa.
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En el SUV compacto el bloque eléctrico estará asociado a las ruedas traseras y desarrollará una potencia de 286 CV, así como un par motor de 400 Nm. Por el momento no se han desvelado sus prestaciones. De suministrar energía al sistema se encarga una batería de 74 kWh, que le permite homologar una autonomía de 440 kilómetros según el ciclo WLTP, con un consumo medio de energía de 20 kWh/100 km. Además, está colocada en la posición más baja posible, por lo que no se reduce ni el espacio para los pasajeros ni la capacidad del maletero respecto a un X3 convencional.
El todocamino abrirá el camino para esta quinta generación de la tecnología BMW eDrive, comenzando a producirse este mismo año. En 2021 también la utilizarán tanto el i4 como el iNEXT.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.