Cuidado con creerse mecánico y cambiar esta pieza del coche: puede salir muy caro

Son muchos los conductores que se aventuran a hacer pequeños trabajos mecánicos relacionados con el mantenimiento de su coche: cambiar algunos filtros, el aceite… Eso sí, hay operaciones que son más complicadas y que pueden terminar saliendo caras, fruto de la falta de conocimiento y experiencia.

Este es el punto de partida de uno de los vídeos publicados por la cuenta Cosas de taller de TikTok: detrás está Lara y su padre, que tiene un taller y es mecánico. Ella le plantea la siguiente situación: “Papá, un cliente me dice que si le puedes cambiar las bombillas de su Nissan Juke en un ratín. Le han echado para atrás en la ITV y quiere volver a pasarla ahora para no perder otro día”.

La respuesta ya deja intuir que esta operación no es sencilla: “¿Un Nissan Juke? ¿En un ratín? Pero ¿está de broma?”. Hija y padre muestran que para cambiar las bombillas de los faros del SUV japonés hay que dar muchos pasos: soltar todos los remaches para desmontar la rejilla delantera, los embellecedores del paso de ruedas, los tornillos laterales del paragolpes, los tornillos inferiores, los anclajes de un lado y de otro, etc.

Todo esto sólo para llegar hasta el faro porque para cambiar las bombillas deben soltar “las lámparas antiniebla” y desmontarlo. A continuación, llega el momento de quitar “sus conectores, sustituimos la lámpara de cruce, lo dejamos todo conectado y ponemos sus tapas para que no le entre suciedad al faro”.

Y para acabar “cambiamos las lámparas de luces largas; pero, como no tenemos acceso, debemos hacerlo con un poco de maña y con el destornillador. Ya está. Lo montamos, lo conectamos y lo tapamos”.

Depende del modelo

Bien es cierto que este proceso no es igual en todos los modelos: cambia de uno a otro. Por esta razón, hay vehículos en los que es muy complicado (como sucede con el Mazda MX-5 NC o con la segunda generación del Renault Megane) y otros en los que es, relativamente, sencillo acceder a los faros delanteros o a los pilotos traseros para cambiar la bombilla. Un ejemplo de ello es el Mini R50/53 o en el Toyota Auris.

Si un conductor se aventura a efectuar un cambio de bombillas sin el conocimiento y la experiencia necesaria, esta operación puede salir cara. No en vano, en algún paso se puede romper una pieza incrementando la factura final.

Cuidado con la ITV

Desde hace algún tiempo, en España, es legal sustituir los faros halógenos de serie por bombillas LED… siempre que exista un componente homologado para el modelo en cuestión.

Muchos conductores optan por este tipo de iluminación porque alumbran más y tienen una vida útil superior: incluso cuando no hay bombillas homologadas de forma específica para su vehículo.

Algo que también puede salir caro: si en la ITV identifican que unos faros o unos pilotos llevan luces LED que no están homologadas, lo calificarán como un defecto grave y no superará la inspección porque el resultado de esta será desfavorable.