En 2018, Christian Ledoux, director global de Movilidad y Servicios Conectados de la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, adelantó que pronto las marcas dejarían de comercializar coches. “Venderemos kilómetros”, vaticinó. Sin embargo, antes de que se hayan extendido los coche compartidos y los alquileres a corto plazo, los fabricantes ya han empezado a vender servicios a bordo.
Como si ofrecieran una cuenta premium de Spotify o cualquier otra plataforma, algunas marcas instalan equipamientos o sistemas en los coches que solo podrán usar los conductores que activen una suscripción.
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Las marcas que se han acogido a esta realidad
Este nuevo modelo de negocio se ha podido desarrollar gracias al avance de la telemática. Las recientes actualizaciones informáticas a distancia que ofrecen los fabricantes han abierto un nuevo mundo de posibilidades para el pago por uso.
Tesla fue la primera firma que inició esta corriente. Los de Elon Musk comenzaron a modificar el ‘software’ a distancia mientras el coche estaba aparcado. Con el avance de la tecnología, las marcas han sido capaces de controlar a distancia la gestión electrónica del motor, activar y desactivar ayudas a la conducción o configurar el climatizador y el sistema de infoentretenimiento.
Audi
Audi ha probado este nicho de negocio con los faros de última generación. Varios modelos del fabricante alemán montan unos faros Digital Matrix LED, que ofrecen, entre otras cosas, un mayor alcance y seguridad. Si se activa el pago por uso, se contará con los faros premium; de lo contrario, actuarán como unas luces básicas.
Mercedes
La empresa fundada por Carl Benz ha aprovechado el lanzamiento del modelo eléctrico EQS para apuntarse al equipamiento por suscripción. Lo ha hecho con el eje trasero direccional. La marca de la estrella lo monta de serie ofreciendo un radio de giro en las ruedas de 4,5 grados.
Sin embargo, si se quiere ampliar ese radio de giro (hasta los 10 grados) para una mayor comodidad y seguridad en el manejo del coche, cobra 489 euros anuales o 1.169 euros por tres años. Se habilita a distancia mediante una actualización informática.
BMW
Tras el lanzamiento del SUV eléctrico iX3, BMW ha decidido ofrecer también un servicio de pago por uso. En este caso, con los asientos calefactables. El vehículo está equipado con ellos, pero solo es posible utilizarlos por unos 18 euros al mes.
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