Los siniestros en las rotondas son habituales y, además, concentran una notable cantidad de infracciones. Según la información recopilada por Automovilistas Europeos Asociados, cada año se producen cerca de 10.000 siniestros con víctimas en intersecciones giratorias.
Según las cifras de la Dirección General de Tráfico (DGT) publicados en su revista Tráfico y Seguridad Vial, uno de cada tres conductores implicados en estos accidentes comete alguna infracción. Principalmente, no respetar la prioridad, llevar una velocidad excesiva y no mantener la distancia de seguridad. Estas son las infracciones más comunes en las glorietas.
Prioridad: entrada en la glorieta
Una de cada cinco infracciones cometidas en las rotondas tiene que ver con el respeto a la prioridad. En particular, por no respetarla a la entrada, lo que puede ocasionar frenazos, colisiones frontolaterales o alcances.
Salvo que una señal o un agente indiquen lo contrario, la prioridad es de los vehículos que circulan por dentro. La sanción por incumplir la norma es de 200 euros, con cuatro puntos de retirada. Esa es una de varias razones para ser sancionados.
Prioridad: salida de la rotonda
En segundo lugar, también genera muchos problemas el abandono de la rotonda desde un carril interior, muy común y peligrosa. La revista de la DGT cita a los expertos de formación: “Una maniobra ilegal que, combinada con el exceso de velocidad y una colisión en ángulo, puede comprometer la estabilidad y provocar incluso el vuelco de alguno de los vehículos implicados”.
Puede tomarse incluso como conducción temeraria, castigada con la retirada de seis puntos y 500 euros de multa.
Exceso de velocidad
El exceso de velocidad no es la infracción más habitual (presente en el 8% de los siniestros en rotondas interurbanas), pero sí una de las más peligrosas. Las rotondas no están pensadas para circular deprisa: hay más riesgo de invadir varios carriles, impedir el avance de otros coches y, además, las consecuencias de un golpe son más graves. El castigo puede ser de hasta seis puntos y 500 euros por conducción temeraria.
Cambios de carril
La DGT enumera varios problemas comunes durante la circulación interior de las rotondas: indisciplina de carril, cambios sin usar los intermitentes y falta de respeto por la prioridad o la distancia de seguridad.
En una rotonda, las normas se aplican como en cualquier vía: fuera de poblado debe ocuparse el carril derecho; en tráfico urbano, el que mejor convenga.
Y, por lo mismo, se deben seguir dos normas elementales: dar prioridad a quien ya circula por el carril y señalizar los cambios con tiempo suficiente. Un cambio de carril sin respetar la prioridad supone una multa de 200 euros.
Respeto a los ciclistas
Como último punto, Tráfico recuerda a los usuarios vulnerables: ciclistas y motoristas. Se debe guardar una distancia de seguridad suficiente y respetar su prioridad, tanto en las entrada, como en las salidas y en la circulación interior. Cuando un grupo de ciclistas entra en una rotonda, se considera que todo el grupo es como un único vehículo. Las multas pueden llegar hasta los 500 euros por conducción temeraria, con la retirada de seis puntos.
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Periodista especializada en marketing digital. Comenzó su carrera en televisión en Chile y de allí dio el salto a la prensa. En Diario As, de Prisa Media, se especializó en SEO, con la creación de contenido estratégico y optimización web, para llegar a Prisa Motor.