Si alguna vez te has fijado en un camión circulando por carretera, es posible que hayas notado algo peculiar: algunas de sus ruedas, normalmente alguno de los ejes traseros, están suspendidas en el aire.
No es un fallo de diseño ni una avería. Se trata de los llamados ‘ejes elevables’, una solución inteligente que mejora la eficiencia, maniobrabilidad y sostenibilidad del transporte por carretera.
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¿Cómo funcionan?
Los ejes elevables permiten que el camión adapte su configuración según la carga que transporta. Cuando el vehículo va vacío o parcialmente cargado, levantar uno de los ejes reduce el número de ruedas en contacto con el asfalto. Esto se traduce en menos desgaste de neumáticos, menor consumo de combustible y una distribución más equilibrada del peso, cumpliendo con las normativas de carga por eje.
Además, estos ejes tienen un papel clave en la maniobrabilidad. Al elevar el eje trasero, el camión puede girar con mayor facilidad, lo que resulta especialmente útil en entornos urbanos o al maniobrar en espacios reducidos. También pueden mejorar la tracción en ciertas condiciones de carretera, como pendientes pronunciadas o superficies deslizantes si la climatología se complica y comienza, por ejemplo, a nevar.
En definitiva, lo que a simple vista parece una rueda ‘sobrante’ es en realidad una herramienta de ingeniería pensada para hacer que los camiones sean más eficientes y seguros. Un detalle técnico que pasa desapercibido para muchos, pero que marca la diferencia en el día a día del transporte profesional.
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Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.