Pasar la ITV es algo más complicado desde verano del año pasado, ya que la inspección técnica de vehículos endureció algunos de sus criterios, transformando fallos que hasta entonces se consideraban leves en puntos que impiden pasarla de manera favorable. Por eso, antes de acudir a la cita, conviene revisar ciertos aspectos del vehículo para evitar errores.
Aunque pueda parecer que conseguir el aprobado es lo común, según datos de AECA-ITV, cuatro millones de vehículos al año suspenden en la revisión y se ven obligados a acudir una segunda vez.
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Antes que nada, a la hora de ir a pasar la ITV se deben tener el nivel de aceite de motor adecuado, es recomendable pedir cita para sufrir esperas innecesarias y hay que llevar consigo el permiso de circulación y la tarjeta de inspección técnica. Además, en la estación se comprobará si el vehículo cuenta con seguro obligatorio.
Elementos que comprobar antes de pasar la ITV
En la revisión siempre se comprueban los mismos aspectos del vehículo, por lo que de antemano se puede ver cuál es su estado y, si no es el correcto, arreglarlo para pasarla de manera favorable:
- Alumbrado y señalización: que funcionen de manera correcta las luces de posición, cruce y largas; así como los intermitentes. Si alguna bombilla está fundida, no es difícil reemplazarla sin necesidad de pasar por el taller.
- Neumáticos: tienen que tener la profundidad de dibujo correcta, no presentar desperfectos y conviene acudir a la ITV con la presión adecuada. Si están en malas condiciones habrá que poner ruedas nuevas.
- Frenos: se pondrá a prueba su capacidad de frenada, así como el estado de sus diversos componentes. Es difícil solucionarlo antes de ir a la revisión y si es un punto que falle, habrá que pasar por el taller. Además, los fallos en el ABS han pasado a considerarse graves.
- Retrovisores: si existe la posibilidad de que se desprendan se considera una falta grave.
- Emisiones contaminantes: superar las emisiones estipuladas es uno de los principales motivos de resultado desfavorable. Para evitarlo, se recomienda circular durante bastante tiempo antes de ir a la ITV para calentar el motor y hacerlo a altas revoluciones, con aceleraciones potentes, para eliminar la carbonilla que pueda haber acumulada, sobre todo en los coches diésel.
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