El turismo activo sobre ruedas se encuentra en auge. Por supuesto que desde hace décadas eran muchos los españoles que decidían pasar sus vacaciones viajando en una caravana o autocaravana, pero el fenómeno ha experimentado un crecimiento significativo en los últimos tiempos.
La pandemia de la COVID-19 supuso un punto de inflexión en este sentido, puesto que la necesidad de mantener las distancias interpersonales y limitar el contacto con los demás incitó a decantarse por una actividad que propiciaba el cumplimiento de tales exigencias.
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Las autocaravanas y, sobre todo, las furgonetas preparadas como viviendas, las populares cámper, se convirtieron en objeto de deseo para muchos. La compra de uno de estos vehículos se vio penalizada un fenómeno inflacionista, impulsado también por problemas en la producción a causa de la crisis de componentes eléctrónicos.
Con precios elevados y escasez de unidades, los que se decidían por la compra lo tenían más difícil, mientras que otros otros optaron por la fórmula del alquiler para satisfacer sus necesidades. La oferta en el sector creció, incluso entre particulares, lo que facilita que estos alquileres, de mayor o menor duración, sean la opción elegida por cada vez más aficionados al mundo del autocaravanismo.
Por todo ello, conviene repasar los aspectos principales en los que debe fijarse quien quiera alquilar una autocaravana.
Planificación
Cuando se va a viajar en autocaravana, sobre todo si la salida es larga, conviene organizar la ruta, pero todavía más importante resulta dedicar tiempo a elegir el tipo de vehículo (autocaravana o cámper), la empresa alquiladora y, en último lugar, el modelo concreto. Y contar con un presupuesto desahogado: en temporada alta, el coste medio diario ronda los 150 euros, gasoil aparte. En temporada baja, la cifra desciende a unos 90 euros.
Antigüedad de la autocaravana
Como primer paso, se debe comprobar la antigüedad de la autocaravana y su estado de conservación. En un mercado con cada vez más demanda y uso, los expertos recomiendan evitar los modelos de más de dos años. Aseicar, la patronal del sector, aconseja “acudir con antelación a la empresa alquiladora para ver los vehículos y observar que estén bien cuidados y limpios”.
Atención a los detalles
Cuando se comparen los modelos de dos o más empresas, hay que fijarse en detalles como el sistema de calefacción del vehículo, la calidad de los colchones, los aislamientos, el tamaño de las claraboyas y la conservación general del interior, así como su limpieza. Se debe certificar también que el equipamiento de seguridad es completo. Y es que el buen equipamiento de uno de estos vehículos puede marcar la diferencia entre unas excelentes vacaciones u otras bastante menos gratificantes.
Distribución interior
Para elegir un modelo que se ajuste a las necesidades, hay que fijarse no solo en el número de plazas, sino también en la distribución interior (sobre todo si viajan personas con problemas de movilidad), las características de las camas (dobles o individuales) o la posibilidad de caminar de pie en el interior.
Documentación de la autocaravana
Aseicar recuerda los datos imprescindibles que deben verificarse: antigüedad, kilometraje, número de plazas homologadas (en viaje y en pernocta), permiso de circulación y seguro del vehículo (que estén destinados al alquiler) e ITV en regla. Con las empresas especializadas en estos servicios no se deberían encontrar mayores complicaciones al respecto.
El contrato de alquiler
La patronal del sector señala un detalle como “muy importante”: se debe solicitar “el contrato de alquiler debidamente relleno con todos los datos y con el importe correcto pagado al alquilador”. Además, hay que asegurarse de que se pueda contactar con la empresa de alquiler ante cualquier imprevisto.
Las coberturas del seguro
Con algunos alquiladores puede resultar difícil saber si la documentación es correcta o si el seguro dispone de la máxima cobertura en caso de un accidente grave, por lo que hay que prestar atención a estos datos. Sobre todo porque durante el periodo de alquiler, en la práctica, el responsable de la autocaravana o cámper es el arrendador.
Alquiler a particulares
Si se decide alquilar a un particular, se debe tener en cuenta que los vehículos suelen ser más antiguos y su puesta a punto puede no estar garantizada. Por otra parte, los seguros que cubre el alquiler entre particulares no tienen el mismo nivel de garantías, y es posible que permiso de circulación del vehículo no esté destinado al alquiler. Así que conviene comprobar bien todos estos aspectos o, en caso de incertidumbre, decantarse por los servicios avalados de empresas profesionales.
En marcha: áreas de pernocta
Un viaje en autocaravana permite improvisar, pero los expertos recomiendan, como medida mínima, tener ubicados los cámpines o las áreas de pernocta de la ruta, sobre todo si se va a permanecer más de una noche en el mismo lugar.
Consejos para inexpertos
Como consejos generales, para evitar incomodidades, conviene comprar los productos frescos día a día, mantener el orden y la limpieza y evitar alimentos muy olorosos. En el manual del buen usuario de autocaravanas, Aseicar cita el queso como trampa en la que caen los novatos y cuya presencia invade el habitáculo.
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