Los escúteres de 125cc son las motos más vendidas en el mercado español, apreciándose un predominio de los modelos de corte y diseño más serio. Son menos los fabricantes que se salen de esa línea y realizan propuestas más deportivas y arriesgadas, como es el caso del Italjet Dragster.
Se trata de un nombre icónico que durante los años noventa fue muy reconocido entre los escúteres deportivos de la época y que en el pasado EICMA de Milán 2021 Italjet confirmó que reviviría como modelo de producción.
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Uno de sus principales argumentos es una imagen mucho más agresiva de lo que se estila en el segmento. Tanto por el anguloso frontal como por el voluminoso escape o el diseño de las llantas, pasando por el contraste con la minimalista y casi inexistente cúpula. Y, sobre todo, por el bastidor multitubular a la vista, que según la combinación de colores resulta realmente llamativo.
Las variantes de 125cc y 200cc son estéticamente idénticas e incluso comparten el mismo motor, un bloque monocilíndrico de cuatro tiempos, con inyección electrónica y refrigerado por agua. Sin embargo, en la primera versión la potencia se queda en 13 CV, mientras que en la segunda llega a 18 CV.
Además, el fabricante ya ha anunciado un amplio catálogo de piezas enfocadas a aumentar el rendimiento del escúter, sobre todo con vistas a entrar en circuito, y que llevaría las variantes hasta los 15 y los 20 CV, respectivamente. La oferta incluye frenos Brembo, amortiguadores Öhlins o un escape de Akrapovič, entre otros.
2022 será un año señalado tanto para la marca como para el modelo, pues se lanzará la Italjet Dragster #e01, la primera eléctrica del fabricante. Se ha confirmado que empleará un motor de 16 CV (12 kW) de potencia máxima, aunque la nominal es de 8 CV (6kW), lo que equivale a una moto de 125cc y le permitirá llegar a un mayor público, pues se podrá conducir con el permiso B de coche.
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Apasionado del motor desde pequeño, primero de las motos y después de los coches, con especial predilección por los modelos nipones. Lleva una década dedicándose al sector, formado primero en Autobild y desde entonces en el Grupo Prisa, probando todo lo que haga ruido... o no.