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El robo de motocicletas se ha convertido en un problema creciente en España, generando preocupación entre los propietarios. Las estadísticas revelan cifras alarmantes, con un promedio de una moto sustraída cada ocho minutos diariamente en todo el territorio nacional. Esto supone que, cada hora, desaparecen 7,5 modelos de dos ruedas. Cada día, la cifra asciende a 180 y cada semana a 1.260. Los datos mensuales hablan de más de 5.000 motos, mientras que la cuantía anual se eleva a casi 60.500 unidades.
Esta problemática afecta a motoristas de todo el país, generando pérdidas económicas y una sensación de inseguridad. Estos datos están extraidos de un informe realizado por el comparador de seguros Rastreator a partir de información del Ministerio de Interior y muestran la gravedad del asunto. Se estima que solo una pequeña proporción de las motos robadas son recuperadas, lo que subraya la necesidad de tomar medidas preventivas.
Ciudades en el punto de mira
Las urbes españolas con mayor número de población suelen ser las que concentran un más robos de motos. Barcelona, Madrid, Málaga y Valencia son las ciudades que año tras año encabezan estas listas. Estas localidades, con una alta densidad de población y un gran parque móvil de dos ruedas, ofrecen un caldo de cultivo ideal para los delincuentes. La facilidad para encontrar motos aparcadas en la vía pública y la posibilidad de dar salida a las piezas robadas en mercados ilícitos contribuyen a esta situación.
Los espejos retrovisores
Recientemente, se ha detectado una nueva técnica empleada por los ladrones para identificar motos susceptibles de ser robadas. Consiste en doblar los espejos retrovisores de las motocicletas estacionadas. Si al cabo de unos días los espejos siguen doblados, esto indica que el propietario no ha utilizado la moto y, por lo tanto, es menos probable que esté vigilando la zona.
Esta técnica representa un nuevo desafío para los motoristas. No solo se trata de la sustracción del vehículo en sí, sino también del robo de objetos personales que puedan guardarse en los huecos, bajo el asiento o en los baúles. Los ladrones aprovechan la aparente falta de atención del propietario para actuar con mayor impunidad.
Recomendaciones para proteger la moto
Ante esta situación, es fundamental extremar las precauciones. Además de utilizar sistemas antirrobo como candados de disco, cadenas o alarmas, se recomienda:
- Revisar los espejos retrovisores: asegurarse de que estén en la posición correcta al estacionar la moto y volver a revisarlos al regresar.
- Estacionar en lugares visibles e iluminados: evitar zonas oscuras o poco transitadas.
- No dejar objetos de valor en la moto: no guardar cascos, chaquetas u otros objetos de valor en los compartimentos de la moto.
- Denunciar cualquier sospecha: si se observa alguna manipulación extraña en la moto, como los espejos doblados, es importante denunciarlo a las autoridades.
La prevención y la concienciación son claves para combatir el robo de motos. Mantenerse informado sobre las nuevas técnicas empleadas por los delincuentes y adoptar medidas de seguridad adicionales puede marcar la diferencia.
Las motos más robadas
Los ladrones suelen tener preferencias por ciertos modelos, generalmente aquellos más populares y con mayor demanda en el mercado de segunda mano o de piezas de repuesto. Marcas como Honda, Yamaha, y escúteres de gran cilindrada suelen ser objetivos frecuentes. La facilidad para despiezar estos vehículos y vender sus componentes en el mercado negro los convierte en una presa atractiva. Estos son los diez modelos más sustraídos en 2024:
- Honda SH 125
- Yamaha T Max
- Kawasaki Z800
- Yamaha C-Max
- KTM 125 Duke
- Yamaha YZF Max
- BMW GS
- Yamaha Cygnus
- Yamaha Neos
- SYM Symphony
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