Ofrece el mismo confort de marcha y suavidad de funcionamiento que otros SUV eléctricos equivalentes, pero el nuevo BMW iX3 se diferencia de las propuestas similares por su mayor dinamismo, porque incluye tracción trasera, en lugar de 4×4, y aporta una conducción más ágil.
El nuevo iX3 es como un X3, aunque a pilas. Mide lo mismo, 4,73 metros de largo, mantiene también su misma cabina amplia y refinada, con cinco plazas aptas para todas las tallas, y solo pierde un poco de maletero, que baja de 550 a 510 litros. Es el primer SUV eléctrico de BMW.
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Ya está disponible desde 72.300 euros, una tarifa 5.500 euros inferior a la anunciada previamente por BMW, pero que sigue siendo algo cara frente a la competencia. Las primeras unidades llegarán a España en primavera de 2021.
Compite con otros SUV eléctricos como los Ford Mustang Mach-E, Jaguar i-Pace y Mercedes EQC, todos con tamaños parecidos y autonomías de entre 414 y 470 kilómetros, pero el BMW iX3 presenta diferencias importantes en precio y potencia. Aunque el Mercedes y el Jaguar rondan los 80.000 euros, tienen 400 CV y prestaciones superiores, mientras que el Ford rinde 269 CV y cuesta unos 15.000 euros menos.
El Audi e-tron de 313 CV puede ser otra opción, porque sale casi igual de precio que el iX3, pero es bastante más grande (4,9 metros y maletero de 660 litros) y presenta menor alcance por carga (339 kilómetros).
Una conducción especial
El nuevo BMW iX3 tiene un motor de 286 CV, propulsión trasera y un peso de 2,1 toneladas, alto en términos absolutos pero ligero al compararlo con los modelos similares. Y sus kilos se distribuyen además de una forma particular, porque tiene más peso atrás que delante (43/57%), induciendo un efecto de giro en las curvas que se suma al de la propulsión trasera para terminar creando una dinámica de gran eficacia en los virajes y una conducción ágil y con un toque especial.
El motor de 286 CV responde con la suavidad habitual en los eléctricos, y aporta también esa salida fulgurante de los vehículos de baterías, cada uno con la contundencia que le permita su potencia. En el BMW iX3 se puede salir con gran brío de los semáforos (acelera de 0 a 100 km/h en 6,8 segundos), adelantar con soltura en carretera y mantener el ritmo en autopista. Y no le falta potencia para nada, pero, lógicamente, tampoco transmite el mismo poderío al acelerar que los modelos de 400 CV. La velocidad máxima está autolimitada a 180 km/h.
El control de estabilidad DSC tiene tres posiciones: conectado; sin control de tracción, que permite deslizar un poco de atrás y divertirse sin riesgos, y desconectado, en el que el conductor debe cuidar el acelerador, especialmente con el suelo mojado, para evitar deslizamientos más allá de lo deseado.
La suspensión electrónica de serie es más firme que suave incluso en el modo de conducción confort, aunque aporta una finura de marcha y una comodidad de filtrado notables. En el modo sport, como detalle curioso, el BMW iX3 suena más y cada aceleración va acompañada de un zumbido electrónico sutil pero audible.
Autonomía real: unos 360 kilómetros
Las pruebas se realizaron en Madrid, por la ciudad y los aledaños, combinando calles estrechas del centro, avenidas amplias de la periferia, autovías de circunvalación y un tramo de carretera secundaria. Y se llevó siempre el climatizador conectado a 22 grados.
En total se recorrieron 92 kilómetros, mezclando conducciones eficientes, normales y deportivas, porque se aceleró a fondo en distintos momentos para comprobar el potencial. El ordenador marcó consumos de entre 17 kWh y 25 kWh, dejando la media final en 21 kWh.
La homologación WLTP anuncia una horquilla de consumo de 18,5 a 19,5 kWh, por lo que el BMW iX3 no se alejó mucho en uso real de los valores certificados. Con el gasto de 21 kWh, se hubieran podido recorrer unos 360 kilómetros antes de agotar la batería. El alcance oficial asciende a 460 kilómetros.
La recarga
Admite recarga normal, en casa, y también con wallbox y en postes rápidos de hasta 150 kW. En el enchufe doméstico, de 2,3 kW de potencia (230 voltios y 10 amperios) tardaría más de 33 horas en completar la operación (bajaría a unas 21 horas si funciona a 16 amperios).
Con wallbox se puede conectar en trifásico, en lugar de monofásico, y subir a una potencia de 11 kW que reduciría la espera a unas 7,5 horas. En los postes rápidos, el BMW iX3 soporta hasta 150 kW y recuperaría el 80% de energía en 34 minutos.
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