La evolución de los diferentes segmentos del mercado es tan evidente como imparable. Ni siquiera los modelos más pequeños, accesibles o económicos de las marcas son ajenos a este fenómeno y es así como podemos encontrarnos con utilitarios tan convincentes como el nuevo i10 de Hyundai.
Se trata de la tercera generación del modelo del segmento A de la marca coreana, del que en su anterior versión se vendieron medio millón de unidades durante los seis años en los que se comercializó (antes su puesto estuvo ocupado por el popular Atos). Lo primero que se aprecia a simple vista es el incremento en casi todas sus dimensiones generales: es más largo y más ancho, aunque un poco más bajo para concederle a su silueta un mayor dinamismo.
Una imagen que supone un enorme paso adelante, se trata de un coche pequeño pero con empaque, agradable a la vista y de líneas actuales, que anticipan que nos encontramos ante un vehículo más ambicioso. Una sensación que se mantiene al acceder a su interior, que ha ganado de forma significativa en habitabilidad para sus ocupantes y en capacidad de carga en el maletero.
Otra de las de las prioridades de los diseñadores ha sido que la calidad del i10 se ciña a los parámetros actuales de la marca, con lo que tanto los acabados como el equipamiento están al mejor de los niveles dentro del segmento: guarnecidos completos, elevalunas eléctricos, climatizador, control de crucero, salpicadero en color, seis airbags…
Mecánicamente, la oferta está adaptada al uso de un coche utilitario como éste, con dos variantes del motor tricilíndrico Kappa en sus versiones de 1.0 y 1,2 litros con potencias de 66 y 87 CV, respectivamente. El cambio es manual de cinco marchas, con la opción de otro automático de cuatro.
La vocación europea del nuevo i10 queda patente, del mismo modo, en la puesta a punto de su chasis, con modificación del esquema de la suspensión, la geometría de la dirección y las cotas generales para adaptarlas a las particularidades de las carreteras de los países a los que va destinado, por tanto con un mayor dinamismo y agilidad en la conducción.
El nuevo Hyundai i10 ya está a la venta con un precio de arranque de 9.710 euros.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram