Cuando un fabricante anuncia la versión de acceso de un modelo enseguida viene a la mente la imagen de un vehículo de potencia modesta, equipamiento justo y precio asequible. Pero aunque esa sea la idea general, si hablamos de un Ferrari toca entrecomillar, y mucho, ese “de acceso”. El modelo en cuestión es el Ferrari GTC4Lusso, que originalmente montaba un motor 6.2 V12 atmosférico de 690 CV y 697 Nm de par.
La nueva versión básica, apellidada ‘T’, opta por un bloque 3.9 V8 biturbo que entrega 610 CV y 760 Nm.
Otra diferencia es que en lugar de la tracción integral de su hermano mayor, el GTC4Lusso T se pasa a la propulsión trasera, lo que le sirve para ahorrar algo de peso.
Incluso con estos cambios, la versión modesta no tiene apenas que envidiar al V12: completa el 0-100 en 3,5 segundos (solo una décima más lento) y alcanza los 320 km/h de velocidad punta (15 km/h menos). Además, tiene la lógica ventaja del consumo, solo 11,6 l/100 km en lugar de los 15 que homologa el atmosférico.
Además, por la calle, salvo por el sonido, nadie podrá notar la diferencia porque estéticamente son idénticos.
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