Son muchas las marcas que han creado modelos específicos para ‘Gran Turismo‘, el popular simulador de automovilismo, algunas de ellas incluso llevándolos a la realidad en forma de maquetas a tamaño real. Lo que no es tan habitual es que un vehículo concebido para el videojuego acabe convertido en un modelo de producción, como ha ocurrido con el McLaren Solus GT.
Está basado en el McLaren Vision GT, que vio la luz en 2017 en Gran Turismo Sport, y, con las convenientes modificaciones y ajustes, va a fabricarse una serie limitada de 25 unidades que están todas vendidas, aunque no ha trascendido su precio.
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Su diseño es el propio de un vehículo de competición, en el que la aerodinámica lo es todo. El frontal es muy bajo, cuenta con labios y extensiones que prácticamente le pegan al suelo, el paragolpes dispone de una enorme entrada de aire y los pasos de rueda conducen el flujo alrededor de la carrocería.
Una velocidad máxima de más de 320 km/h
Tras el habitáculo, hay otra toma de aire superior y la zaga está rematada por un voluminoso alerón y un radical difusor. Gracias a ello es capaz de generar hasta 1.200 kilos de carga aerodinámica.
Otro aspecto clave ha sido el de la ligereza. La fibra de carbono es omnipresente y se han empleado otros materiales ligeros como el titanio aplicado mediante impresión 3D. Gracias a ello pesa menos de 1.000 kilos.
La guinda la pone el motor, un bloque 5.2 V10 que es capaz de subir hasta a 10.000 revoluciones por minuto. Desarrolla una potencia de 840 CV y un par máximo de 650 Nm que se encarga de gestionar una caja de cambios secuencial de siete velocidades derivada del mundo de la competición.
Dicha configuración le permite acelerar de 0 a 100 km/h en menos de 2,5 segundos y alcanzar una velocidad máxima que supere los 322 km/h.
El McLaren Solus GT es un modelo de uso exclusivo en circuito y algunas informaciones apuntan a que cada ejemplar podría costar entre 3 y 4 millones de euros.
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