Pocas veces una marca decide sacar cuatro carrocerías diferentes para un mismo modelo, pero Aston Martin sabe que sus clientes son especiales y fieles, y que no van a dejar pasar la oportunidad de hacerse con un coche de lo más exclusivo. Con el Vanquish Zagato la opción de negocio ha sido perfecta: primero fue el Coupe, luego el Volante, más tarde el Speedster y, como fin de fiesta, ahora llega el Vanquish Zagato Shooting Brake, con un formato de lo más peculiar para el terreno de los deportivos y del que solo se fabricarán 99 unidades.
La ‘ranchera’ del cuarteto integra perfectamente la alargada caída del techo en el diseño del modelo, manteniendo su aire atlético y con una silueta de lo más proporcionada. Es sin duda el más versátil de los cuatro, sobre todo por la presencia de un gran portón trasero de apertura eléctrica, pero continúa siendo un biplaza como sus hermanos.
Bajo el capó tampoco hay novedad, ni falta que hace, puesto que monta un motor 6.0 V12 atmosférico (la marca está empezando a usar bloques turbo de menor tamaño) de 600 CV de potencia. Nada se sabe de sus prestaciones, pero probablemente haga el 0-100 km/h en menos de cuatro segundos, teniendo en cuenta los datos de Coupe y Volante (3,5 y 3,9 segundos).
Al contrario que con las versiones anteriores, en este caso la producción entera no se ha vendido antes del anuncio, aunque la marca confirma que algún cliente ha adquirido una unidad de cada una de las variantes. Para conducir esta tendrá que esperar, puesto que su fabricación comenzará a primeros de 2018.
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