En el vídeo, que ya circula por redes sociales y plataformas como YouTube, se ve cómo las baterías de CATL son sometidas a una serie de pruebas brutales: desde aplastamientos multidireccionales hasta perforaciones con clavos, taladros de alta velocidad y cortes con sierras eléctricas.
Más información
Lo sorprendente es que, en todos los casos, las baterías mantienen su integridad sin incendiarse ni explotar, algo que históricamente ha sido uno de los mayores temores en torno a los vehículos eléctricos.
¿Por qué se hacen estas pruebas tan radicales?
CATL, líder mundial en fabricación de baterías, busca con este tipo de demostraciones reforzar la confianza del consumidor en la seguridad de sus productos.
Estas pruebas no solo cumplen con los estándares más exigentes, sino que los superan, anticipándose a futuras normativas internacionales.
En un momento en el que la electrificación del transporte avanza a toda velocidad, la seguridad se convierte en un argumento clave y CATL parece tenerlo muy claro.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, Twitter o Instagram
Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.