Parece que las películas de ciencia ficción de los setenta y ochenta hicieron mal los cálculos: llegamos al año 2000 y no hubo coches voladores, pero cerca de 2020 ya hay proyectos reales para lanzar al mercado este tipo de vehículos. Las distintas compañías dedicadas a ello optan por diversas vías para hacer realidad sus modelos y, en este caso, el Koncepto Millenya se basa en los populares drones.
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Su creador es Kyxz Mendiola, un filipino apasionado por esta tecnología desde que aterrizó en su país: “Cuando los drones llegaron a Filipinas empecé a construirlos como afición y también para hacer grabaciones. Por curiosidad, me pregunté si podría construir algo suficientemente grande como para llevarme”.
Y lo consiguió. Ha fabricado un prototipo con las dimensiones suficientes como para que quepa una persona en su interior, propulsado por 16 hélices y motores eléctricos que están gestionados por 16 ordenadores. Su capacidad de vuelo es algo limitada, puesto que solo puede elevarse seis metros desde el suelo (20 pies) y su autonomía oscila entre los 10 y 15 minutos. Sin embargo, teniendo en cuenta que lo ha financiado él mismo y que todavía se trata del proyecto inicial, es resultado es muy bueno. De hecho detalles como el hecho de estar fabricado en fibra de carbono para aligerar peso son muestra de su calidad.
Hasta tal punto está bien desarrollado que ha llamado la atención de una compañí especializada en vehículos eléctricos, Star 8. Su idea es perfeccionar el Koncepto Millenya para convertirlo en un coche volador con capacidad para hasta dos personas y con un peso que rondará los 200 kilos. De hecho ya tienen hasta su nombre comercial: Future 8.
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