Un vídeo viral, que muestra unos hechos sucedidos hace un tiempo, recuerda por qué no hay que aparcar nunca cerca de una boca de incendios. Esto puede obstaculizar el acceso de los bomberos en caso de emergencia y retrasar la extinción de un incendio, y así poner en riesgo vidas y propiedades.
En España, la multa por estacionar en las proximidades de una boca de incendios depende de las ordenanzas municipales, pero puede ser muy elevada. Y, en todo caso, el vehículo puede resultar afectado en una urgencia. Bien lo sabe el dueño de este coche en Estados Unidos, que aparcó justo ahí y los bomberos tuvieron que meter la manguera a través de los cristales del vehículo.
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