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“El mejor y el peor día de mi vida”. Así comienza este joven una historia que parece sacada de una serie de televisión, pero que ha sucedido en la vida real. Precisamente, en un festival de música.
Todo comenzó cuando aparcó su coche de color azul (no se identifica el modelo) en el festival. Al volver, se lo encontró arañado. Si esto ya supuso una sorpresa, más aún lo fue el mensaje que encontró metido en el tirador de la puerta de su vehículo.
¿Era el número telefónico de la persona que había dañado el coche? Algo parecido. La autora dejó una nota con su nombre de usuario en Instagram. El chico decidió escribirle y hablaron para organizar el pago de los gastos, pero la historia no terminó como él pensaba.
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