La N-634, a la altura de Mesía, en A Coruña, fue escenario ayer de una persecución de lo más angustiante. Un camionero persiguió al automóvil en el que viajaba una familia, llegando a rozarles en más de una ocasión y provocando el pánico de los ocupantes del vehículo.
En el interior, viajaba una familia con dos menores, de cuatro y 17 años, siendo este último el que se encarga de grabar y alertar a su madre de que que el camión se acerca.
Más información
La Guardia Civil consiguió detener al conductor del camión que trató, repetidas veces, de embestir el coche de esta familia a la altura de Villalba (Lugo). A este se le imputa un delito de conducción temeraria.
La conducción temeraria una infracción grave sancionada con 500 euros de multa y la pérdida de seis puntos en el carnet de conducir, pero también puede alcanzar la categoría de delito según la gravedad.
El artículo 380 del Código Penal establece el castigo para quien conduce “un vehículo de motor o un ciclomotor con temeridad manifiesta y pusiere en concreto peligro la vida o la integridad de las personas”. Es decir, toda acción que ponga en riesgo la seguridad, tanto propia del conductor como de sus acompañantes u otros usuarios de la vía.
Un delito de conducción temeraria
Este artículo continúa con las posibles consecuencias y explica las penas asociadadas al delito de conducción temeraria: “Será castigado con las penas de prisión de seis meses a dos años y privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores por tiempo superior, de uno hasta seis años”.
Una página de Facebook ha mostrado el vídeo desde el punto de vista del camión, donde se ve que la conductora del coche realiza un adelantamiento algo apurado para superar al vehículo articulado.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram