Newsletter
Las discusiones causadas por incidencias de tráfico están a la orden del día. En algunos casos, incluso, los conductores llegan a las manos. Uno de los conflictos que más altercados genera es el relacionado con guardar plazas de aparcamiento.
El año pasado, se viralizaron dos vídeos sobre incidentes en España y abrieron el debate en las redes sociales. “Es ilegal guardar el sitio”, argumentaba un usuario. “No hay ninguna ley que prohíba hacer eso!! y al que no le guste ajo y agua”, rebatía otro.
Más información
Se encuentra este ‘Mercedes’ en un aparcamiento y no puede creerse qué coche es de verdad Un ‘buen amigo’
En Francia sucedió una situación similar. Según se ve en una publicación de Instagram, un hombre decidió guardar una plaza de aparcamiento a otro que estaba por venir, y pensó que la mejor forma sería sentándose en el sitio. El individuo supuso que eso impediría que otro ocupara la plaza, pero la reacción del conductor de un Toyota fue inesperada.
Guardar un sitio para aparcar: ¿es legal?
En España, esta situación es a todas luces ilegal. La legislación no se pronuncia sobre este hecho en concreto, pero la ley de tráfico se refiere a ello indirectamente: “Mientras exista refugio, una zona peatonal o algún otro espacio adecuado, los peatones no podrán permanecer detenidos en el arcén ni en la calzada, ni aunque sea a la espera de un vehículo, ya que para subirse tendrán que esperar guarecidos a que este se encuentre a su altura”.
La multa: hasta 200 euros
Se deduce que ningún peatón puede permanecer invadiendo la calzada, en este caso para reservar un sitio. Por lo tanto, el coche que pase y quiera hacer uso del lugar de aparcamiento está en todo su derecho. Si se generara un conflicto, lo mejor es acudir a la policía. Con la ley en la mano, se puede sancionar con 80 euros a la persona que guarda el sitio y los agentes permitirán aparcar al otro vehículo.
El siguiente vídeo muestra una escena en Talavera de la Reina. Ahí, una mujer le guardaba un sitio a su hija que conducía el coche, pero llegó otro conductor y ocupó la plaza. “Que te pares, no me pilles”, exclamó la mujer que a pesar de sus intentos, el conductor consiguió aparcar. De ahí, se inició una larga discusión que duró casi cinco minutos.
Sigue toda la información de EL MOTOR desde Facebook, X o Instagram
