Las señas de identidad de Volkswagen (VW), como el equilibrio de conjunto y la funcionalidad, en el tamaño y formato todocamino del Tiguan, pero con mecánica 100% eléctrica y hasta 520 kilómetros de autonomía. Son las claves del Volkswagen ID.4, primer SUV 100% eléctrico de la nueva sigla alemana. Y uno de los modelos a pilas más completos y racionales del mercado, porque su radio de acción le sitúa muy cerca de poder cumplir como primer coche de la familia.
Está ya a la venta con unas tarifas elevadas, aunque accesibles: desde 38.085 euros, que según la marca pueden bajar hasta 29.200 con descuentos, financiando la compra y sumando las ayudas del Plan Moves II. Pero no es un precio representativo, porque apenas quedan fondos en alguna comunidad autónoma.
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Un Tiguan a pilas
El Volkswagen ID.4 es la segunda entrega de la nueva marca eléctrica. Pero si el ID.3 era la reinterpretación del Golf con mecánica de baterías, el nuevo modelo es un SUV medio que compite en la categoría con más ventas en Europa y se hace también en China y EE UU. Los dos comparten la misma base, la plataforma MEB del grupo alemán, específica para sus modelos eléctricos, que integra el módulo de baterías bajo el piso y libera espacio arriba para los pasajeros y su equipaje.
Diseño limpio e imagen sólida
La carrocería SUV del Volkswagen ID.4 apuesta por la limpieza de líneas y transmite robustez, con trazos limpios sin apenas adornos que se aprecian desde todos los ángulos. Empezando por el frontal, que presenta un rostro rotundo e incluye una banda que une los faros simulando la parrilla de los modelos térmicos. Siguiendo por el lateral, sin apenas pliegues, salvo el trazo ascendente de las ventanillas. Y la zaga, elevada y robusta, con los pilotos también de lado a lado. En conjunto, es un SUV cuidado de aspecto contundente y con un estilo propio y refinado.
El Volkswagen ID.4 presenta buenos asientos y una imagen interior con un toque limpio y futurista. Y suma detalles vistosos como el volante y la pantalla central. Sin embargo, el ambiente resulta algo frío y austero, la instrumentación es demasiado simple y tiene algunos plásticos de aspecto mejorable.
Muy amplio y con un gran maletero
La posición de las baterías debajo del piso permite ofrecer un interior muy diáfano y desahogado que genera sensación de amplitud. Delante es cómodo y detrás también, y las plazas traseras sobresalen por su capacidad y pueden alojar sin agobios a los adultos más altos (de 1,80 metros en adelante) y corpulentos. Y suma además un maletero grande 550 litros con formas aprovechables.
Preparado para tres sillas infantiles
Una particularidad interesante del Volkswagen ID.4 es que viene preparado para colocar tres sillas infantiles, con anclajes Isofix, en el asiento posterior. Y este es un detalle fundamental para las familias que tengan tres niños, porque en muchos casos les obliga a comprar modelos de siete plazas. De hecho, es una solución muy poco habitual que ofrecen solo algunos coches, y la mayoría son bastante más grandes y caros.
De 149 a 204 CV, y hasta 520 kilómetros de rango
La gama del Volkswagen ID.4 propone dos baterías con 52 y 77 kWh que aportan hasta 340 y 520 kilómetros de autonomía (desde 38.085 y 43.595 euros). La primera se ofrece con motores de 149 o 170 CV y el último acelera de 0 a 100 km/h en 10,9 segundos. La más grande se vende con 174 o 204 CV, y el más potente baja a nueve segundos.
Todas las versiones cuentan con propulsión trasera al igual que el ID.3.
Habrá versiones GTX, los GTi a pilas
Serán el equivalente deportivo a los GTI y GTD de gasolina y diésel, pero ahora con mecánica eléctrica. Equiparán la batería grande de 77 kWh, pero añadirán un segundo motor en el tren delantero para disponer de tracción 4×4. En total tendrán 300 CV, aunque perderán algo de autonomía para quedarse en unos 480 kilómetros. Llegarán en la segunda mitad del año.
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