La empresa japonesa Asahi Kasei celebra su centenario presentando el prototipo AKXY2. Un curioso vehículo que muestra una carrocería dividida con una sección inferior muy aerodinámica y una cubierta superior de cristal. Esta última se eleva verticalmente, mientras que una puerta se despliega para dar acceso al habitáculo.
Según la empresa, se ha diseñado para imaginar “cómo los valores de sostenibilidad, satisfacción y sociedad influirán en las necesidades de la movilidad futura en el camino hacia la automatización y la electrificación”.
Más información
En el exterior, cuenta con unos esbeltos grupos ópticos y la misma forma tanto por delante como por detrás. El modelo también monta neumáticos fabricados con componentes de origen biológico y de baja resistencia a la rodadura.
A bordo, espacio y luminosidad
El diseño futurista continúa en el habitáculo, ya que hay una otomana y dos asientos individuales acolchados también realizados con materiales biológicos y reciclados.
Para que los pasajeros se sientan como en casa, el prototipo AKXY2 incluye una tapicería de microfibra, una pequeña mesa de madera y una pantalla de información minimalista. Dado que el modelo carece de volante y pedales, resulta obvio que está concebido para ser autónomo.
Un sensor de CO2 trabaja para garantizar una calidad de aire óptima a bordo, mientras que la iluminación ambiental se ha resuelto mediante fibra óptica y algunos elementos retroiluminados.
Este prototipo se mostrará próximamente en varios eventos, como el Salón de Detroit en septiembre y el CES Las Vegas 2023, ambos en Estados Unidos.
Periodista especializado en motor desde hace más de 20 años, ha trabajado en diferentes gabinetes de prensa (Federación Española de Automovilismo o Circuito del Jarama) y medios especializados (Motor 16, Marca Motor o Auto Bild). Apasionado de coches, motos y, ahora también, de los cacharros con alas.