Devel Sixteen: cómo pasar de prometer el cielo a desaparecer sin dejar rastro

Corría el año 2013 cuando en el Salón del Automóvil de Dubái se presentó un coche que dejó sin aliento a los presentes. Más que un coche, era un híper-deportivo que prometía ser el más potente del mundo, plantando cara así a los conocidos modelos de Bugatti.

Se llamaba Devel Sixteen y era un proyecto de una marca sita en Dubái, Defining Extreme Vehicles Car Industry LLC, en cuyo nombre ya se puede intuir su línea de fabricación. ¿Qué fue de este espectacular modelo?

Después de semejante declaración de intenciones, poco se ha vuelto a saber del Devel Sixteen. Según la misma presentación de la marca dubaití, este súper coche estaba diseñado para montar un motor V16 de 12,3 litros (fabricado en EE.UU. por Steve Morris Engines). En otras cifras, sería capaz de entregar 5.000 CV y alcanzar una velocidad máxima de 560 kilómetros por hora.

Muchos fueron los que esperaron ansiosos la producción del Devel Sixteen, aunque pocos serían los que podrían permitírselo. En el 2017, los datos cambiaron y la marca prometió una versión dos versiones más ‘razonables’, con motores de 16 cilindros y 3.000 CV y un V8 biturbo de 1.500 CV. El Devel Sixteen más extremo seguía en proyecto, prometido solo para la pista en este caso.

Con un diseño agresivo, unas formas abombadas muy particulares y dos escapes masivos en la trasera, el Devel Sixteen lo tenía todo para triunfar entre los bolsillos más pudientes, sobre todo aquellos de los Emiratos Árabes Unidos. Las imágenes y vídeos compartidos en redes sociales daban cuenta de la potencia y la fuerza de este súper coche y se confirmaron dos años de lista de espera para recibirlo.

Una única unidad producida y entregada

No obstante, aunque las cuentas en redes siguen estando activas, el Devel Sixteen parece que nunca entró en producción con ninguno de los tres motores prometidos. Eso sí, según certificó la página supercars.net en su momento, solo uno de estos súper deportivos fue entregado a su dueño, un coleccionista japonés.

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Sin embargo, en el momento se comentó que esta unidad no llevaba el increíble motor que convertía al Devel Sixteen en el coche más potente del mundo, sino que equipaba un propulsor más modesto de ocho cilindros.

Al final, parece que el Devel Sixteen y el sueño de crear el coche más potente del mundo se quedaron en eso, una aspiración que no llegó a ver la luz más que en prototipos, ferias y exhibiciones. Quién sabe si, en un futuro, la empresa dubaití conseguirá cumplir con esta promesa y con el resto de modelos que también ha anunciado en sus redes, como el Devel Sixty.