Otro problema que los coches chinos no vieron venir: ¿por qué son los más deseados por los ladrones?

En Reino Unido, las ventas de coches chinos han subido considerablemente en 2025. Tanto es así que ya representan uno de cada doce coches nuevos vendidos, aproximadamente. Esto son buenas noticias para las marcas asiáticas… y también malas.

Malas porque en Reino Unido, de media, se producen 11 robos de vehículos por hora. Según las cifras de la Oficina de Estadísticas Nacionales, el robo total de vehículos denunciado en Inglaterra y Gales aumentó a 102.000 hasta finales de marzo de 2025.

Los modelos chinos se han convertido en los preferidos de los ladrones y, según informa The Guardian, las aseguradoras han pedido a las marcas que introduzcan en sus modelos dispositivos de bloqueo más resistentes para que sea más difícil robarlos.

Fáciles de robar

Aquí está la clave: los coches chinos son un blanco fácil. No hay datos sobre los delitos automovilísticos de China y sus estadísticas oficiales sobre delincuencia son poco fiables, pero todo apunta a que el robo de vehículos es más bajo que en Reino Unido.

Existe, pero no representa el mismo desafío que en Europa. Por este motivo, ciertas funciones antirrobo no se han priorizado: inmovilizadores, protección de puertas para evitar el acceso a los mecanismos de bloqueo internos, detección de intrusos basada en software…

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Más medidas de seguridad

En Reino Unido, las aseguradoras evalúan los nuevos modelos para conocer su nivel de riesgo. Estos test incluyen una prueba de ataque de dos minutos: sus resultados les llevaron a pedir a las marcas chinas que reforzasen sus coches para hacer frente a los ladrones de vehículos.

Las incorporaciones han evolucionado desde las tuercas antirrobo de las llantas hasta una capa extra de acero alrededor de las cerraduras de las puertas del coche, pasando por software para detectar y proteger contra entradas no autorizadas.

Igual que japoneses y coreanos

Estas medidas, normalmente, no requieren grandes intervenciones estructurales. Por ello, pueden aplicarse a modelos nuevos que ya están terminados y, además, las marcas chinas se han mostrado receptivas y ágiles a la hora de implementar estas mejoras.

Chery y BYD son un buen ejemplo de ello. International Motors, un distribuidor de Reino Unido que importa automóviles Xpeng y GWM, ha explicado que los fabricantes coreanos y japoneses se enfrentaron a una situación semejante cuando, años antes, aterrizaron en Europa y Reino Unido.