Al reparar cualquier desperfecto en el coche, hay una recomendación esencial para la seguridad que todos deberían seguir: nunca utilizar piezas falsificadas. Sin embargo, identificarlas correctamente suele ser complicado.
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Hay un estudio de la Oficina de Propiedad Intelectual (IPO, por sus siglas en inglés) de Reino Unido, cuyos resultados son sorprendentes. Revelan que el 15% de los conductores admitió haber comprado un componente falso y de ellos, el 42% no sabían que lo era.
Una de las principales razones para adquirir piezas falsificadas es su precio, generalmente más bajo. Lo que muchos conductores desconocen es que algunos de estos componentes no pasan las mismas pruebas de seguridad que las piezas originales y esto supone un riesgo importante en la conducción.
Baterías, neumáticos y airbags
Entre los componentes falsos figuran las baterías. Una falsa puede causar un cortocircuito en el sistema eléctrico o incluso explotar. Del mismo modo, montar ruedas no originales afecta al agarre, la distancia de frenado y, en consecuencia, compromete gravemente la seguridad general del vehículo en cualquier situación.
Otro componente falsificado que se adquiere con frecuencia son los airbags, una práctica extremadamente peligrosa porque probablemente no hayan superado las estrictas pruebas de seguridad. Esto implica un riesgo real: podrían no inflarse durante un accidente o incluso desplegarse de manera inesperada, poniendo en peligro la vida del conductor.
Cuatro pistas para identificar una pieza falsa
Para evitar adquirir piezas falsificadas, el conductor debe fijarse en cuatro aspectos clave al comprar: precio, vendedor, especificaciones técnicas y garantía ofrecida por el fabricante.
Precio
Si el precio parece demasiado atractivo para ser real, probablemente no lo sea. Las piezas falsificadas suelen fabricarse con materiales de baja calidad y, por ello, resultan considerablemente más económicas que las originales.
Vendedor
Lo más recomendable es comprar estos componentes en tiendas oficiales y reconocidas. En el caso de páginas web, deben ser autorizadas y fiables, como eBay Motors. Si no cumplen estos requisitos, lo mejor es desconfiar y evitar la compra.
Piezas específicas
Las piezas originales están diseñadas para cada vehículo y encajan perfectamente. Las falsificadas, en cambio, pueden no adaptarse bien, lo que es una pista clave para detectarlas. Además, podrían dañar otras partes durante la instalación o con el tiempo, afectando gravemente la seguridad.
Garantía
Los fabricantes oficiales entregan certificados de calidad y autenticidad junto con garantía en sus piezas. Si falta alguno de estos elementos, es probable que el componente sea falsificado.
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Desde que aprendió a hablar y escribir, una de sus pasiones siempre fue contar todo lo que pasaba a su alrededor. Hizo las maletas y cambió Zaragoza por Madrid para estudiar Periodismo en la Universidad Complutense. Antes de graduarse, el mundo del motor se cruzó en su camino… y nunca lo ha abandonado.