Esta ola de robos se ha convertido en una preocupante tendencia en todo el mundo y también está presente en España. Los catalizadores se han convertido en el objetivo de los delincuentes que buscan el valor de los metales que contienen.
En más de una ocasión, los amigos de lo ajeno han puesto el ojo en el gremio del taxi, en especial en la Comunidad de Madrid, donde incluso un vecino grabó desde su casa cómo se sustraía esta pieza en plena calle.
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Los cortadores, o delincuentes que hacen el trabajo de meterse debajo de los coches y quitar estos elementos, tardan escasos segundos en cortar y hacerse con el catalizador, cuyo objetivo final es descomponerla en los metales que contiene.
Lo hacen por su alto valor en el mercado negro, precisamente ahora que todas las materias primas han subido de forma notable.
La marca más apetecida
La razón principal por la que los ladrones atacan los taxis es que muchos de ellos son modelos Toyota. Y es que un catalizador como los que llevan valen de 1.800 a 3.000 euros. Más concretamente, el del Toyota Prius, un modelo ampliamente utilizado por los taxistas en muchas ciudades del país.
De hecho, en 2022, la Policía Municipal de Madrid informaba de la detención de un individuo tras una persecución al darse a la fuga de un control. Dentro del vehículo encontraron las herramientas necesarias para el robo de catalizadores y entre ellas se ven un gato hidráulico y una sierra eléctrica.
En Estados Unidos, adonde también ha llegado esta nueva moda de robos, han surgido ideas como estampar el número de chasis del vehículo en los catalizadores o hacer ilegal la compra de estos elementos cuando no estén conectados a un vehículo por parte de los comercios.
No es difícil encontrar en internet protectores para la pieza tan codiciada de este modelo de Toyota. La empresa especialiazda Catshield, por ejemplo, vende una placa de protección que tiene un precio de 150 euros y se caracteriza por ser un elemento para que los ladrones lo tengan bastante más difícil.
¿Por qué son tan caros los catalizadores?
Los grupos de delincuencia organizada suelen robar los catalizadores por los componentes que contienen y que son extremadamente valiosos, además de la escasez de oferta en todo el mundo, que ha creado una mayor demanda de los mismos y, por tanto, un aumento en su valor.
Mediante una reacción provocada por los metales preciosos contenidos en el interior del catalizador (rodio, paladio y platino) y la aportación de oxígeno atmosférico, las nocivas emisiones se transforman en nitrógeno (N2), dióxido de carbono (CO2) y vapor de agua (H2O), menos dañinos para el medio ambiente.
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